El responsable de Producto Big Data de BBVA Data & Analitics, Juan Carlos Plaza, participó a principios de mes en una jornada organizada por la Cámara de Comercio de A Coruña y BBVA titulada Big Day, Digital Data sobre el impacto de la digitalización en las empresas gallegas. Este experto ejemplifica que los cambios generados en los últimos años por la revolución digital equivalen a que en el sector de la automoción "un coche pudiese ir a la luna y solo gastase un litro de gasolina". Por ello, defiende que cualquier empresa, por pequeña que sea, debe asumir que la digitalización y el análisis de datos son vitales para el futuro de su negocio.

- Cada vez hay más eventos sobre la importancia de la digitalización (esta semana hubo al menos tres en A Coruña). ¿Realmente es tan importante este aspecto para que las empresas sean competitivas y aseguren su futuro?

-Sí, es fundamental. Estamos en un proceso de transformación que está cambiando la estructura de muchos sectores y negocios y es importante que todas las empresas, independientemente de su tamaño, se adapten a estos cambios.

- Hay informes que revelan grandes diferencias por comunidades en cuanto a digitalización y Galicia casi siempre está a la cola. ¿Es así?

-Un estudio de mis compañeros de BBVA Research, con un indicador de digitalidad de las empresas, revela que Galicia está ligeramente por detrás de la media de España. Este indicador va de 0 a 1, donde 1 es el país más digital de nuestro entorno, que sería Luxemburgo, y de ese 0 a 1, Galicia tiene un 0,6, mientras que la media de España es un 0,65. Está un poco por detrás, pero por delante de países de nuestro entorno como Portugal, con un 0,59, o Italia, con un 0,45.

- ¿Toda empresa que no apueste por la digitalización lo va a tener difícil para salir adelante?

-Sí. Esta transformación empezó afectando a sectores más concretos como la prensa o la música, pero se está extendiendo al resto. Hay que ponerse las pilas para que no nos pille desprevenidos. Hay varias cosas que se pueden hacer y una parte fundamental es el uso de los datos. BBVA es una empresa que se dedica al tratamiento de datos, financieros pero datos, y los tiene en su core [núcleo]. Trabajamos para comunicar esa experiencia a los clientes y que les saquen valor.

- Como experto en Big Data, en la gestión de datos, ¿hasta qué punto es importante analizar y gestionar bien los datos de los clientes o de un negocio para ofrecer un buen producto?

-Es vital. Si eres un comercio, tener una estrategia inteligente basada en el uso de los datos te ayuda de muchas formas. Hay una parte que es optimizar los procesos, como el stock de la tienda o los turnos del personal si tienes información sobre qué es lo que se vende en tu entorno o cuáles son las horas de más actividad. Pero hay una segunda vía que es tomar mejores decisiones basadas en un dato objetivo, como la optimización de las campañas de marketing. Si tienes información de dónde proceden los compradores que van a tu negocio o qué tipo de clientes son, puedes definir mejor campañas de buzoneo o a través de internet. Para eso, BBVA tiene productos y servicios específicos, como Commerce360, que comparte la información con los comercios y les da ideas o acciones personalizadas que pueden desarrollar teniendo en cuenta los datos de sus negocios.

- ¿No es necesario, sobre todo en empresas pequeñas, que tienen más dificultades, tener un experto en Big Data, para beneficiarse de las ventajas de la gestión y análisis de datos?

-No. Proyectos como el de BBVA buscan, una vez desarrolladas plataformas que permiten tratar grandes cantidades de datos, democratizar el acceso a este tipo de indicadores para que incluso los comercios más pequeños, solo por ser clientes, puedan obtener esta información a través de la plataforma. Antes solo si eras una gran cadena te podías permitir acceder a estudios de mercado o realizar encuestas que por su precio quedaban muy lejos de un pequeño comercio.

- En su ponencia dijo que la digitalización llevará a la aparición de nuevos productos o servicios por esa gestión de los datos. ¿Ocurrirá como con la aparición de nuevos perfiles profesionales?

-Sí. Las empresas que están triunfando en los últimos cinco o diez años tienen el uso de los datos en el core de su organización. Los motores de datos son los que están sacando esas compañías adelante, caso de Google, Facebook, Spotify, Amazon? Hace muy pocos años ni siquiera existían y ahora son grandes players del sector por su uso eficiente de los datos y por tener algoritmos o motores que les permiten sacar partido de esta información. Es como si los datos fuesen un nueva materia prima que tenemos en esta nueva revolución tecnológica que estamos viviendo.

- Hay expertos que dicen que esta revolución digital es más importante incluso, por sus efectos y los cambios que conlleva, que la revolución industrial, ¿es así?

-Sí. La revolución digital lleva ya varios años en marcha y lo que tiene de distinto respecto a otros ciclos tecnológicos anteriores es que es mucho más rápida. En el caso del sector del automóvil, si la tecnología que hay detrás de un coche hubiese mejorado tan drásticamente en los últimos años como lo hizo el mundo de la computación, con ese coche se podría ir a la luna y con el coste de un litro de gasolina.

- Parece que en poco tiempo, sin movernos, podremos hacer cualquier cosa de forma remota solo con tener un móvil, una tableta o un ordenador delante?

-Esta digitalización, la universalización en el acceso a los datos, hace cada vez más sencillo acceder a la información y hacer cualquier trámite en cualquier momento. Llevado al mundo del comercio, no quiere decir que el comercio físico pierda importancia, porque la experiencia física del comprador no se va a perder, pero cambiarán las formas en las que el comprador interactúa con su comercio.

- Digamos que van a tener un peso distinto, lo físico y lo digital.

-Eso es. Va a haber nuevos tipos de relación, nuevas experiencias. Ahora hay gente que va al entorno físico a ver los productos, a tocarlos, y después igual hace la compra online, incluso en el mismo establecimiento. Pero la forma de relacionarse o aproximarse de un cliente digital o uno tradicional cambia y los comercios tienen que adaptarse.

- En esta digitalización, ¿van al mismo ritmo las empresas privadas y las administraciones o hay grandes diferencias?

-Hay ciertas diferencias. Citando de nuevo el estudio de mis compañeros de BBVA Research, en el caso de Galicia este era uno de los puntos en los que parecía que destacaba. La Administración gallega ha avanzado algo más que la media en materia de digitalización, algo muy importante tanto en el mundo privado como en el público.