Los puertos españoles están abocados a las nuevas jornadas de paros de los estibadores convocadas para la próxima semana, una vez que la patronal Anesco rechazó ayer la última propuesta planteada por los sindicatos para negociar el nuevo convenio del sector, al considerar ilegales muchos de sus puntos. Las empresas de la estiba ni siquiera llegaron a votar la propuesta sindical en la asamblea extraordinaria que celebraron ayer por la tarde, y que tenía el análisis de la propuesta sindical como único punto del orden del día.

La votación no se produjo dado que Anesco encargó al despacho Garrigues un informe jurídico sobre el planteamiento de los sindicatos que advierte de que algunos de sus puntos "pueden llevar a las empresas a infringir leyes como la de Competencia" y a afrontar las consiguientes multas.

Pese a ello, y dada su "firme voluntad de alcanzar a la mayor brevedad un acuerdo", la asamblea de Anesco realizó una contrapropuesta que remitirá el próximo martes a los sindicatos del sector (Coordinadora de Trabajadores del Mar, UGT, CCOO, CIG y CGT).

En paralelo, la patronal Anesco volvió a "llamar a la responsabilidad" a las centrales sindicales "para que desconvoquen las huelgas y permitan un nuevo marco razonable de diálogo".

No obstante, como los sindicatos habían condicionado la continuidad de los paros a que la patronal aceptara su propuesta, el rechazo aboca a los puertos a una nueva semana de huelgas. El calendario ya convocado prevé paros parciales para el lunes, 19 de junio, el miércoles día 21 y viernes 23. Los sindicatos presentaron además un nuevo preaviso de huelga en el que convocan cuatro nuevos paros de 48 horas, en este caso de carácter intermitente, para la última semana de junio y la primera de julio.

El presidente de la Autoridad Portuaria de A Coruña, Enrique Losada, cifró ayer en 100.000 euros el impacto económico en el puerto de la huelga de estibadores de esta semana, secundada al 100%.