Las ventas de automóviles siguen al alza en España. Las matriculaciones de vehículos vivieron su mejor mes de agosto desde 2007, en vísperas de la recesión, gracias al empuje de las ventas de vehículos a gasolina y de híbridos y eléctricos, que compensan la pérdida de fuelle del diesel, que ya ve peligrar su posición de liderazgo en el mercado nacional. Una tónica que no se cumple en Galicia, en donde este combustible sigue ocupando el cetro.

El pasado mes se contabilizaron un total de 72.470 matriculaciones, tras repuntar un 13,1% respecto a agosto de 2016. En el caso de Galicia, el fuerte aumento no es suficiente para sacar a la comunidad de las posiciones de cola en el balance anual. Pese a que en agosto las ventas se incrementaron un 12,9% frente a 2016, el avance desde enero es mucho más tímido. Las matriculaciones en los ocho primeros meses del año son un 2,35% superiores a las del mismo periodo del año pasado. Algo que contrasta con el vigor en el resto de España en donde el crecimiento es tres veces superior (6,91%).

Uno de los factores que está provocando este estancamiento en el nivel de ventas es la dificultad con la que se están topando los vehículos eléctricos para hacerse un hueco en Galicia, que continúa siendo uno de los mayores feudos de los motores diesel del territorio español. Los vehículos eléctricos e híbridos ganan tracción en el conjunto del Estado y en agosto supusieron el 6,9% de las matriculaciones. Nunca antes habían supuesto un porcentaje tan elevado, aunque el grado de penetración arroja variaciones importantes según la comunidad.

En Galicia, por contra, la implantación de los vehículos eléctricos es más reducida. En los ocho primeros meses del año se vendieron 73 unidades de este tipo en la comunidad, apenas un 2% del total de las registradas en el conjunto del país. Su implantación entre los conductores gallegos todavía dista mucho de acercarse a la del diesel.

Y es que las medidas emprendidas por los gobiernos para reducir progresivamente su peso dentro del parque de automóviles y rebajar los niveles de contaminación no impiden que los coches a diesel sean los favoritos en las nuevas matriculaciones en Galicia. Aunque caen un 7,3% respecto al dato registrado en 2016, todavía representan el 59,8% del total de las realizadas en la comunidad entre los meses de enero y agosto. El peso del diesel entre las nuevas incorporaciones a la flota de automóviles de Galicia es sensiblemente superior a la media estatal, en donde supone algo menos de la mitad (el 49,5%) de los 849.912 vehículos vendidos en los ocho primeros meses del año.

El diesel brilla con especial intensidad en la comunidad gallega y en particular en Lugo. El 71,43% de los vehículos matriculados en la provincia lucense consumen gasóleo. En ninguna otra provincia española se registra un dato alto. Jaén le sigue con un 71,11% y Toledo, a más distancia, con un 65,6%. En Pontevedra supone un 57,81%, en Ourense, el 57,25%, mientras que A Coruña registra el dato más reducido en la comunidad, al situarse en el 50,46%.

El C4 sigue en el podio

Los vehículos de Volkswagen encabezaron la tabla de matriculaciones el pasado mes de agosto. Se vendieron un total de 5.251 unidades, por delante de las 5.137 de Renault, las 4.994 de Toyota y las 4.803 de Peugeot. Con el liderato de la marca alemana el pasado mes, el grupo Volkswagen se afianza como líder en el acumulado del año, en el que logra imponerse a PSA, aunque por un estrecho margen. La firma de automoción con sede en Alemania acapara el 20,21% de las matriculaciones en los ocho primeros meses del año en España, con Seat al frente, seguido de cerca por el 20% que registra la matriz de Citroën.

Entre los modelos más vendidos en el conjunto del año se sitúan a la cabeza dos fabricados por Seat. Se trata del Ibiza y el León, con 25.907 y 24.591 unidades, respectivamente, y del Citroën C4, fabricado en las instalaciones de PSA en Vigo, con 22.313.