El alcalde de Arteixo, Carlos Calvelo (PP), achacó ayer a una "venganza hacia la Xunta" la decisión de Ferroglobe (la compañía resultante de la fusión de Ferroatlántica y la norteamericana Globe) de trasladar la planta de silicio solar prevista en este municipio a Puertollano (Ciudad Real). El regidor aludió así al desencuentro surgido entre la multinacional y el Gobierno autonómico, que no autorizó la venta de centrales hidroeléctricas en A Costa da Morte pretendida por la compañía.

Mientras, el responsable de la sección de Metal, Construcciones y Afines de UGT en A Coruña, Roberto Teijido, que compareció en rueda de prensa junto al primer edil y el delegado sindical de Silicio Ferrosolar, Carlos Abelenda, exigió a la Xunta "explicaciones", tras los anuncios realizados sobre la ejecución de esta planta, y pidió que tome "medidas".

Para el alcalde, la decisión de no ubicar en Arteixo un proyecto desarrollado en este municipio obedece a la decisión de la Xunta de no permitir la venta de las centrales hidroeléctricas de los ríos Xallas y Grande, explotadas por Ferroglobe. "Es una auténtica falta de respeto", dijo después de precisar que desde la empresa no se pusieron en contacto con el ayuntamiento para comunicarle la decisión.

Por ello, anunció que pedirá una reunión al conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde. También incidió en que fue la empresa fue la que anunció en septiembre de 2016 que la nueva planta de silicio solar se ubicaría en Arteixo. Junto a los puestos de trabajo que se dejarán de crear, unos 90, señaló que también están "en riesgo" los de los casi 40 trabajadores que prestan servicios para el centro de investigación y desarrollo de Ferrosolar. Al igual que el dirigente de UGT, incidió en que se trata de una empresa que ha recibido subvenciones de la Xunta.

"La materia prima es gallega", insistió Roberto Teijido sobre la procedencia de un mineral obtenido en la mina de Serrabal. Tanto él como el regidor recordaron, además, que la transformación se realiza en Sabón por lo que criticó la decisión de la empresa.

El presidente del gigante metalúrgico Ferroglobe, Javier López Madrid, anunció el pasado martes que la planta piloto de fabricación de silicio para placas fotovoltaicas de Ferrosolar (empresa vinculada a la multinacional Ferroglobe) podría estar en funcionamiento "antes de doce meses" en Puertollano (Ciudad Real) tras una inversión inicial que estiman en más de 70 millones de euros.

La propia compañía advirtió el pasado mes de julio que la negativa de la Xunta a la segregación de las actividades que Ferroatlántica en A Costa da Morte (lo que frustró la venta de las centrales hidroeléctricas) impedía "la realización del plan de futuro" en Galicia de esta empresa, que es el mayor productor de metal silicio del mundo.

Por su parte, la Xunta justificó este verano que no pudo autorizar la petición de Ferroglobe porque, tras evaluar en detalle la solicitud de la empresa, dictaminó que no se cumplían los requisitos legales para eliminar la condición esencial prevista en la concesión, que consistía en garantizar el mantenimiento de la actividad industrial.