La factura de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) por el despido de su ex secretario general, Fausto Santamarina, ya tiene números. Tras alcanzar un acuerdo amistoso antes de celebrarse el juicio, la asociación de empresarios accede a abonar un total de 197.000 euros de los 207.000 euros adicionales que reclamaba Santamarina como compensación a su cese en octubre del año pasado.

El ex secretario general consideraba que no había causas económicas ni organizativas que justificasen el cobro de 20 días por año trabajo en lugar de los 45. La factura total del despido de la persona que había permanecido 16 años al frente de la secretaría general asciende a 280.000 euros, una vez sumados los 83.000 euros que fueron abonados hace trece meses. La decisión de prescindir de Santamarina se enmarcaba en su plan de viabilidad que recogía un recorte de su plantilla para rebajar su partida dedicada a costes laborales en un 30% y con el que se preveía volver a beneficios este mismo año.

Fuentes del sector indican que, de acuerdo a las afirmaciones de la CEG, el desembolso tendrá impacto en su tesorería, por implicar una salida de efectivo, pero no implicaría un paso atrás en su camino por salir de pérdidas. La razón, argumentan, es que la confederación capitaneada por Antón Arias recalca que esa cantidad ya estaba presupuestada y, por tanto, su impacto estaría recogido ya en su cuenta de resultados, aunque muestran su escepticismo.