Los vehículos con motor diésel pierden uno de sus principales reclamos. Desde que los carburantes iniciaron su espiral de subidas en junio, el precio del gasóleo en Galicia se dispara más del doble que el de la gasolina y ve amenazada su condición de carburante más barato.
El gasóleo cotiza ya en las gasolineras gallegas a una media de 1,192 euros el litro, tras dispararse un 9,9% desde finales de junio, y se acerca al precio de la gasolina que, tras encarecerse un 4,7% en el mismo periodo, ya marca los 1,272 euros el litro.
Los bolsillos de los gallegos que tienen vehículos diésel no solo se resienten más que los de los dueños de coches de gasolina sino que lo padecen con más intensidad que los propietarios de diésel del resto de España, donde el gasóleo sube casi tres puntos menos: un 7,2%.
Tras casi tres años de espera sin que Competencia abra expediente para atajar este agravio comparativo, los gallegos pagan ya casi cuatro euros más por rellenar el tanque de diésel que en el resto de España. Para repostar un depósito de 55 litros de capacidad, un gallego tiene que hacer un desembolso de 65,6 euros, frente a los 62 euros en el conjunto del Estado.
En el caso de la gasolina, el sobreprecio por llenar el depósito es ligeramente inferior: de 2,3 euros (70 euros en Galicia, frente a 67,7 en España). Sin embargo, el motor diésel supone en Galicia el 60% de las nuevas matriculaciones hasta octubre, mientras que en el resto de España este porcentaje desciende hasta el 49%.
