UGT y CCOO reclaman que el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) sea en España equivalente al 60% del salario medio del país, tal y como fija la Carta Social Europea, para "corregir la anomalía histórica" respecto a otros países de la Unión Europea.

El PSOE y el Gobierno acordaron elevar el SMI hasta los 707 euros -antes era de 655 euros- en 2017, pero las centrales sindicales mayoritarias en España ven esta cantidad insuficiente y denuncian que el derecho a una remuneración suficiente "no se cumple" con el actual SMI.

Por ello, los sindicatos instan a resolver el diferencial entre el salario mínimo español y el de los demás países de la UE y piden que se refleje el crecimiento económico "en una recuperación del peso de los salarios". "Recordamos que el ajuste salarial, bajada de sueldos, se ha centrado de forma especialmente dura en los sueldos más bajos", señalan CCOO y UGT, que añaden que la subida del SMI es "imprescindible" antes de que acabe el presente ejercicio.