El mercado laboral no escapa del envejecimiento poblacional. El número de trabajadores gallegos que deciden prolongar su vida laboral más allá de la edad de retiro -65 años y medio para aquellos que no hayan cotizado al menos 36,5 años- se dispara un 52% en la última década. Un total de 10.860 trabajadores de la comunidad (de los cuales 6.878 son autónomos) rebasan la edad legal de jubilación y ya representan el 1,1% del total de afiliados a la Seguridad Social.

Los trabajadores que alargan su vida laboral más allá de los 65 años de edad se dividen entre aquellos que reciben una pensión de jubilación (el 50% de la cantidad que correspondería en el caso de no estar trabajando) y los que no. En el conjunto del Estado hay 33.823 personas acogidas a la denominada jubilación activa, que permite simultanear el trabajo remunerado con el cobro de la prestación, lo que representa una quinta parte del total de 181.778 afiliados a la Seguridad Social que superan los 65 años de edad en el conjunto del país.