La Audiencia Nacional investiga a CaixaBank por un delito de blanqueo de capitales al atribuir a diez de sus sucursales cercanas al polígono Cobo Calleja, en Fuenlabrada, haber ayudado supuestamente a tramas chinas a lavar dinero. El auto del caso explica que los directores de las sucursales permitieron a miembros de las tramas usar testaferros y DNI falsos, hacer ingresos en efectivo con facturas falsas para eludir a Hacienda y no alertaron de esa actividad sospechosa.