Los secretarios generales de UGT y CCOO, Pepe Álvarez y Unai Sordo, defendieron ayer que las pensiones tienen que estar "blindadas en la Constitución" para que ningún Gobierno pueda jugar con los recursos de los pensionistas y para ello iniciaron una campaña de recogida de firmas frente al Congreso de los Diputados. La iniciativa, organizada por la Unión de Jubilados y Pensionistas de UGT y CCOO en Madrid, reclama que las pensiones vuelvan a revalorizarse conforme al IPC. Por ello, instaron a los pensionistas de ahora y del futuro a participar en las movilizaciones del próximo 1 de Mayo.

Ambos líderes sindicales incidieron en la necesidad de alcanzar nuevos acuerdos, más allá de las subidas de las pensiones. "La lucha no sólo pasa por la revalorización", explicó Álvarez, que indicó que el factor de sostenibilidad aplicará una devaluación de las pensiones del 30% en 20 años.

Sordo defendió que el sistema público de pensiones "es viable y depende de que haya voluntad política el que haya pensiones públicas las próximas tres décadas". "Tenemos propuestas y voluntad de movilización", insistió, reclamando medidas "que tendrían efecto pasado mañana", como el fin de las bonificaciones de cotizaciones a costa del sistema.