El descontento generalizado de la sociedad gallega con las políticas del Gobierno en materia laboral y social va en aumento. La mecha prendida por los movimientos feministas y sindicatos el pasado 8 de marzo -Día de la Mujer-, con movilizaciones masivas en toda Galicia para exigir igualdad entre sexosmovilizaciones Galicia igualdad , ha continuado en las últimas semanas con las protestas de los jubilados y pensionistas para reclamar prestaciones dignas hasta llegar a unos actos del Primero de Mayo -Día del Trabajador- que contaron ayer con una mayor participación que en los ejercicios anteriores. Miles de personas salieron a la calle en las principales ciudades y localidades de Galicia para reclamar el fin de la precariedad laboral, mejores salarios, pensiones dignas, igualdad entre sexos, acabar con la discriminación y la recuperación de los derechos laborales y sociales perdidos con la crisis económica.

Los actos centrales del Día del Trabajo en Galicia fueron -tanto en el caso de CCOO y UGT como en el de la CIG, con manifestaciones nuevamente por separado- en Vigo, donde los sindicatos cifraron la participación en unas 20.000 personas sumando las dos marchas.

Las movilizaciones convocadas en A Coruña -tres, pues a las dos como las de Vigo se sumó una de la CGT- aglutinaron a más de 5.000 personas, una cifra que la Policía Local rebajó a cerca de 4.000. Según la sala de pantallas del 092 la marcha de CCOO y UGT contó con la participación de 2.300 personas, la de la CIG con 1.300 y la de CGT, con unas 300.

Los datos oficiales confirman, sin embargo, esa mayor afluencia a los actos reivindicativos de este año pues en 2017 la Policía Local cifró la participación en la manifestación coruñesa de los sindicatos de ámbito nacional -y eso que era el acto central en Galicia- en 1.700 personas (cifra que en 2016 aún fue inferior, con solo 900 asistentes), en 700 la de la CIG y en 250 la de CGTmanifestación Galicia.

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Manifestaciones del 1 de mayo en A Coruña

Pero en las marchas de este año hubo además un mayor espíritu reinvidicativo por varios frentes, entre ellos los movimientos feministas reclamando igualdad laboral, salarial y social, con referencias a la dignidad y respeto por las personas y contra la violencia machista, en referencia a la controvertida sentencia de La Manada. De hecho, varias pancartas portaron lemas en favor de las mujeres como #vivaslibresunidas En loita pola igualdade, Demasiadas mulleres con traballo invisible ou precario, sen dereito a nada o As mulleres movémonos.

La defensa del sistema público de pensiones fue otras de las grandes reivindicaciones, con la participación de centenares de jubilados y pensionistas. De hecho, a las consignas contra las políticas del Gobierno como "Onde están? Non se ven, os postos de traballo do PP", "A culpa de quen é? Dos que votan o PP" o "O público é servicio, o privado beneficio" se sumaron otras referentes al sistema de pensiones como "Queremos a pensión de Juan Carlos de Borbón", "Mariano Corleone, sube las pensiones" o "Non, non, non, á reforma das pensións".

Y a mujeres y pensionistas se sumaron centenares de trabajadores exigiendo el fin de la precariedad y de los salarios bajos derivados de la crisis, que provocaron "la aparición del trabajador pobre". En sus reivindicaciones, sin embargo, no apuntaron solo al Gobierno sino también a los empresarios, a los que acusaron de "avaricia", por lo que reclamaron un reparto justo de la riqueza y que los beneficios empresariales no vayan a parar solo a los resultados de las compañías. En esa mejor distribución y subida de los salarios denunciaron como obstáculo la "nula" predisposición de la patronal a negociar los convenios colectivos. Máis de 50.000 persoas en Galicia , rezaba una pancarta en A Coruña, acompañada de consignas como "Basta xa da avaricia empresarial", "Non, non, non, á eventualidade" o "Violencia é non chegar a fin de mes".

Los líderes sindicales reclamaron el fin de la precariedad, de la pobreza, la desigualdad, pensiones "dignas", servicios públicos de calidad, la defensa de la cultura, del medioambiente, la recuperación de derechos y servicios perdidos con la crisis, la recuperación del talento que optó por la emigración y la erradicación de la corrupción. Por todos estos motivos, y teniendo en cuenta el respaldo con el que cuentan, los sindicatos de Galicia advirtieron ayer de que en los próximos meses se intensificarán las movilizaciones en defensa de los derechos de los trabajadores y de la sociedad en general. CCOO y UGT no descartan convocar una huelga general -uno de los cánticos más repetidos en sus manifestaciones fue "Folga, folga, folga xeral"- a la que la CIG ya puso ayer fecha. El secretario xeral del sindicato nacionalista, Paulo Carril, dijo en Vigo que será el próximo 19 de junio y animó al resto de sindicatos a sumarse a la convocatoria. En caso de que haya unidad y todas las centrales sindicales apoyen este paro total de la actividad en Galicia, la fecha podría cambiar fruto de las negociaciones, como reconoció el propio Carril.