Ahora sí parece que la venta del Banco Caixa Geral, con el que el grupo financiero público portugués Caixa Geral de Depósitos opera en España desde su sede social en Vigo, va adelante. No es la primera vez que el Gobierno luso tantea al mercado para saber quién está dispuesto a hacerse con él y por cuánto. En noviembre del pasado año el interés fue escaso. Pero la operación está encarrilada en principio tras la decisión que acaba de tomar el Consejo del Ministros del país de abrir la puerta a ofertas vinculantes después de analizar las muestras de interés sin compromiso firme que llegaron en las últimas semanas. Y entre las que está Abanca. Todo apunta a que la principal entidad de Galicia pasará la criba y la semana que viene recibirá la confirmación oficial de que puede entrar a analizar las tripas del negocio para poner sobre la mesa un precio. Junto a ella, según adelantó ayer Expansión y algunos periódicos portugueses, podrían estar Cajamar y el fondo Cerberus.

Desde que en 2016 incurrió en las mayores pérdidas de su historia, casi 1.900 millones de euros, Caixa Geral de Depósitos está a dieta. Al Estado portugués no le quedó otro remedio que negociar con la Comisión Europea su recapitalización. Unos 4.400 millones de euros, aproximadamente la mitad a través de una inyección de capital. En ese mismo momento se puso en marcha un profundo proceso de reestructuración que incluía el cartel de "se vende" en el negocio internacional de Francia, Angola, Sudáfrica, Mozambique, Timor y España.

Banco Caixa Geral cuenta con 110 oficinas, según sus últimas cuentas públicas de cierre de 2017. Extremadura (42) y Madrid (13) son sus regiones más fuertes, junto con Galicia, donde dispone de 21 sucursales en Pontevedra, seis en Ourense, cuatro en A Coruña y otras cuatro en Lugo. El área de Negocio suma 437 trabajadores. Acumula 2.950 millones en depósitos y 3.446 millones en crédito a la clientela. La morosidad se situó en el 3,07%. Los activos totales superan los 5.200 millones. El beneficio en 2017 ascendió a 26,4 millones.

La presencia y la actividad de Banco Caixa Geral encaja como un guante en la estrategia de crecimiento de Abanca y su apuesta por expandirse en la zona noroeste del país. Ganaría así terreno en su mercado natural, Galicia, y en Extremadura para completar el mapa. La entidad está atenta a todas las oportunidades que aporten valor a su actual modelo, como insiste en cada comparecencia su presidente, Juan Carlos Escotet, y dispone de un colchón de liquidez de 2.000 millones de euros para realizar operaciones corporativas.