La Unión Europea ha puesto en marcha un nuevo etiquetado para los carburantes con el objetivo de mejorar la información dada a los consumidores sobre los combustibles que consumen sus vehículos, según informaron las asociaciones españolas Anfac (fabricantes), Anesdor (sector de las dos ruedas), AOP (operadores de productos petrolíferos) y UPI (operadores de productos petrolíferos sin capacidad de refino).

La nueva directiva comunitaria requiere que los estados miembros de la UE, así como los estados integrados en el Espacio Económico Europeo (EEE) -la eurozona- mejoren la información dada a los consumidores, que tienen una "gran" variedad de combustibles para sus automóviles. Las nuevas etiquetas europeas serán situadas próximas al tapón de llenado, en los manuales de usuario de los vehículos, en los aparatos surtidores y también en los concesionarios.