Sargadelos, la histórica firma gallega de cerámica de diseño, avanza "con paso firme" para salir de la situación postconcursal con un constante aumento de la producción y las ventas, lo que ha redundado en un importante crecimiento de la plantilla en los últimos años. En 2013, antes de entrar en concurso de acreedores, la empresa aplicó un expediente de regulación de empleo (ERE) de extinción que afectó a casi la mitad de los trabajadores de sus dos fábricas, 29 de los 77 que tenía en Cerámicas O Castro (la planta de Sada) y 41 de los 88 adscritos a la factoría Cerámicas de Sargadelos, en el concello lucense de Cervo. Tras la aplicación del despido colectivo, la firma pasó de rondar los 200 empleados en plantilla a quedarse con poco más de un centenar: 48 en la planta coruñesa, 47 en la lucense y en torno a una decena en las tiendas.

Un lustro después, la sociedad fundada por Luis Seoane e Isaac Díaz Pardo vuelve a tener niveles de empleo previos a la aplicación del ERE de 2013, según los datos facilitados a este diario por su presidente y consejero delegado, Segismundo García. Sargadelos roza ya los 220 profesionales en nómina tras realizar numerosas incorporaciones en los últimos meses. Cerámicas de Sargadelos -que cuenta con producción y los departamentos de administración y diseño- ronda el centenar de profesionales, frente a los 70 de Cerámicas O Castro y más de 40 repartidos en las tiendas propiedad de la firma. Precisamente, a finales de junio Sargadelos inauguró un establecimiento en OviedoSargadelos , con dos dependientas, la segunda apertura este año tras otra en Madrid a mediados de abril.

"Cuando yo llegué en 2014 teníamos unos 90 trabajadores y ahora estamos en 217. Antes del ERE eran cerca de 200", resume el administrador único del grupo, que vincula este aumento de plantilla al crecimiento de la actividad de la compañía. "Estamos produciendo y vendiendo más que nunca. Facturamos unos ocho millones de euros al año, cuando en los peores tiempos no llegábamos ni a los 3,5 millones", detalla García, que asegura que el crecimiento del negocio desde 2014 ronda "el 20% anual". De la cifra de negocios de Sargadelos, el 12% corresponde a la venta online, que incluso registra tasas de crecimiento más altas. "La venta por internet es fundamental. Tenemos un departamento con tres personas y el negocio electrónico crece entre un 30% y un 40% al año", detalla el presidente de la histórica firma gallega, que se muestra optimista con los resultados del grupo. "La gente tenía miedo, pensaba que esto iba a cerrar, y al contrario, estamos invirtiendo", destaca García.

En la mejora de la empresa fueron determinantes medidas como la diversificación del negocio o la apuesta por la venta online -la marca blanca (otro de los proyectos para relanzar la firma) fue descartada por su escasa rentabilidad- y ahora Sargadelos ofrece también productos textiles, como mantelería, o bolsos, entre otros. "Se hace todo aquí, en España, y es caro porque son productos de diseño y calidad. Los elaborados en piel se fabrican en Ubrique [en la provincia de Cádiz] porque sabemos que son de la máxima calidad", argumenta el presidente de Sargadelos, que también tiene acuerdos con grandes firmas de diseño como Ágatha Ruiz de la Prada, Ailanto, Martín Azúa o Pepa Poch bien para usar algunas de sus creaciones o símbolos bien para realizar productos para ellas.

"Estamos en expansión. Vendemos en Cuba, en Japón, Reino Unido, Alemania, bastante en México... Queremos ser una empresa que ofrezca calidad y no renegamos de nuestras raíces gallegas. Pretendemos ser una embajada de Galicia, de lo que es el diseño gallego", asevera García.

El consejero delegado de Sargadelos confía en cerrar el convenio de acreedores en seis años, lo que supondría devolver los alrededor de dos millones de deuda que tiene ahora, frente a los seis que adeudaba en 2014, cuando asumió la dirección de la empresa, unos inicios que recuerda con amargor. "Este año aún hay alguna sociedad que da pérdidas, porque estamos pagando deudas, pero en general el negocio productivo da beneficios. Cuando cogí la empresa ni los sindicatos ni los medios de comunicación ni la Administración, por su exceso de burocracia, ayudaron a superar la situación de concurso", lamenta el administrador único del grupo fundado por Luis Seoane e Isaac Díaz Pardo. "Los gestores y los empleados fuimos los que nos empeñamos en que la empresa tenía futuro, y a día de hoy lo tiene", concluye Segismundo García.