El sector del taxi en Galicia ha vuelto a la normalidad este miércoles después de que a las 00,00 horas finalizase una huelga que se extendió durante día y medio, desde el mediodía del lunes.

Según han confirmado a Europa Press diversas fuentes del sector, la vuelta al trabajo se produjo "muy tranquilamente" y se hizo efectiva después del aviso de que no continuarían con las protestas en la Comunidad gallega. En A Coruña, Santiago y Vigo indican que el servicio en las ciudades está funcionando "sin problema ninguno".

Todo ello al inicio de una jornada en la que representantes del sector se reúnen en A Coruña, a partir de las 10,30 horas, con la conselleira de Infraestruturas e Vivenda, Ethel Vázquez, antes de que la mandataria acuda a la reunión de la Conferencia Nacional de Transportes convocada por el Ministerio de Fomento, a las 18,30 horas en Madrid.

Finalmente, la huelga concluyó en Galicia tal y como estaba prevista, a las 00,00 horas del miércoles. Sin embargo, el gerente de Radio Taxi Compostela indicaba durante las protestas del martes que "todo dependía de lo que dijesen" sus compañeros de Madrid, que continúan con las reivindicaciones tras finalizar sin acuerdo la reunión que mantuvieron con Fomento este lunes.

"Que se cumpla la ley"

Las reivindicaciones en la Comunidad gallega culminaron con las movilizaciones en Santiago, con las que los taxistas demandaron al Gobierno central "que se cumpla la ley" en relación a los VTC, los vehículos de turismo con conductor, con los que quieren competir "en igualdad de condiciones".

En la actualidad, la normativa establece que por cada 30 licencias de taxi haya como máximo un vehículo de transporte concertado. No obstante, el gerente de Radio Taxi en Santiago de Compostela, Jesús García, cifró que la proporción en la capital gallega es de uno a cuatro o incluso cinco.

Además, tal y como indicó en declaraciones a los medios, están pendientes de salir, por la vía judicial, unas 76.000 licencias de VTC, algo que, según repitieron varios de los manifestantes, "sería el fin del taxi en España".

A ello se le suma, según añadió otro de los taxistas, Gonzalo Arias, que estos vehículos "no cumplen las normativas" porque "no están en las bases" que se les asignan y "no tienen precios regulados", por lo que "pueden cobrar lo que les dé la gana", aseguró.

"Las consecuencias es que el problema lo estamos teniendo nosotros. Hemos pasado a facturar la mitad de lo que estábamos cobrando, y cada taxi es una empresa que da de comer a una familia", expresó.

Jornada de protestas

Los conductores se concentraron con sus coches en el mediodía del martes en las inmediaciones del Estadio de San Lázaro, donde han debatido las protestar que desarrollarían. Sobre un centenar de miembros del gremio acudieron desde varios municipios gallegos para movilizarse por las calles compostelanas.

Una vez en el Estadio de San Lázaro, el gerente de Radio Taxi, Jesús García, instó al resto de manifestantes a "ser cívicos" y "no dar la imagen" de "violentos" como en otras ciudades de España, donde algunos de los participantes en las protestas llegaron a agredir algunos VTC e incluso a intimidar a los pasajeros de su interior.

Pasadas las 13,00 horas se dirigieron al complejo administrativo de San Caetano, sede de la Xunta, para hacer sonar sus bocinas. De este modo, y sin provocar problemas circulatorios en Santiago, accedieron a la Praza do Obradoiro por Xoán XXII, donde algunos de los taxistas aparcaron sus vehículos para continuar con los cánticos y las pitadas.

Finalizadas las movilizaciones, acudieron a sus habituales paradas de trabajo para informar sobre su cometido a la ciudadanía y a los taxistas que no secundaban las protestas.

El único momento de tensión se vivió cuando un VTC salió desde la Praza do Obradoiro sin colocar la señalización que lo identifica como un servicio público, de modo que la Policía Local procedió a interceptarlo ante las protestas de los taxistas.