El operador del sistema eléctrico español -la empresa semipública Red Eléctrica de España (REE)- realiza desde este año cortes de suministro a la industria gran consumidora de energía con la finalidad de abaratar el recibo del consumidor final. Lo emplea cuando recurrir a esta opción es más barato que dar entrada al pool a energías más caras como las generadas con carbón o gas. La conocida como interrumpibilidad por criterios económicos implicó que en lo que va de año REE diese numerosas órdenes de interrupción o reducción del consumo a grandes fábricas de firmas presentes en Galicia como Alcoa, Ferroatlántica, Megasa o Celsa.
En lo que va de mes, sin embargo, y pese a que los precios de la electricidad en el mercado mayorista están en niveles máximos, Red Eléctrica apenas recurrió a esta opción. Lo hizo una única vez, el pasado día 3 a las 11.00 horas, cuando ordenó a varias fábricas reducir el consumo de electricidad para un total de 496 megavatios, según los datos publicados por el propio operador del sistema español. Entre las plantas que recibieron esa orden está la que Alcoa tiene en San Cibrao, en Lugo, pero no afectó a la factoría de A Grela. Mientras, en agosto REE activó cuatro días la interrumpibilidad, hasta sumar casi 2.000 megavatios.
