El secretario de Estado para la Seguridad Social, Octavio Granado, defendió ayer que las pensiones se terminen calculando con toda la vida laboral, en línea con lo que ocurre en el resto de Europa, así como buscar "la fórmula" que permita mantener el poder adquisitivo de las pensiones. Durante su comparecencia en la comisión parlamentaria del Pacto de Toledo, Granado recordó que en 2022 habrá concluido el aumento gradual de 15 a 25 años cotizados del periodo de cómputo para calcular la pensión inicial que se estableció en la reforma de pensiones de 2011. "Probablemente yo propondría al diálogo social, aunque yo ya no voy a estar en mi actual responsabilidad, que se continuara subiendo el periodo de cómputo un año y otro año y otro año, hasta llegar al final de la vida laboral", afirmó Granado.

"Pero ése es un río que deberemos cruzar en 2023 y dejen ustedes al diálogo social que lo cruce en 2022, que seguro que lo hará y lo hará de forma razonable", dijo a los portavoces de la comisión. En este sentido, aseguró que utilizar periodos de cómputo escasos, "perjudica a los que son despedidos al final de su vida laboral" y recordó que en toda Europa "el periodo de computo es prácticamente toda la vida laboral".

Para Granado, la sostenibilidad futura de las pensiones no pasa por recortar el gasto, sino por reflexionar sobre las fórmulas que permitan mejorar los ingresos del sistema garantizando a los pensionistas que no van a perder poder adquisitivo.

Precisamente, la ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio, adelantó ayer que el año que viene también se necesitará algún crédito para hacer frente al pago ordinario y extraordinario de las pensiones, pues "únicamente con cotizaciones el sistema no se puede mantener". "Hay que transmitir confianza, porque el Gobierno no va a dejar de pagar las pensiones", subrayó la ministra, tras afirmar que es "incuestionable" que la Tesorería General de la Seguridad Social va a necesitar una inyección de dinero vía Presupuestos Generales del Estado (PGE) para pagar las pensiones.

Prestaciones por maternidad

Granado también reveló en su comparecencia en el Congreso que el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) paralizó durante 15 días el pago de las prestaciones por maternidad y paternidad para que su aplicación informática deje de retener el IRPF tras la sentencia del Tribunal Supremo que establece la exención de este gravamen. El Ministerio de Trabajo envió al de Hacienda los datos de las prestaciones por maternidad y paternidad abonadas por la Seguridad Social desde 2014, ejercicio a partir del cual se puede reclamar a la Agencia Tributaria la devolución de las cantidades retenidas. Está por ver si la devolución será de oficio o los afectados tendrán que pedir el reintegro.