Los rendimientos del trabajo son la principal fuente de renta para los contribuyentes gallegos. Fueron casi 24.000 millones de euros en 2016 en ingresos íntegros, según los datos publicados por la Agencia Tributaria, a una media de 20.730 euros por persona, que baja hasta los 18.125 euros tras descontar el pago de impuestos y las cotizaciones. Eso dejaría los ingresos netos en alrededor de 1.300 euros en 14 pagas.

A eso hay que sumar los 764 millones de euros que aportaron a los gallegos los intereses de cuentas bancarias, activos financieros y rendimientos de deuda u otros productos financieros. Por el alquiler de inmuebles, los contribuyentes de la comunidad obtuvieron 994 millones de euros. Las rentas procedentes de actividades económicas -donde se incluyen los autónomos- ascendieron a 1.839 millones de euros.

Montante en cotizaciones sociales

El millón de contribuyentes de la campaña de la Renta de 2017 (donde se declaran los ingresos de 2016) sumó 1.125 millones de euros en cotizaciones a la Seguridad Social. Y otros 24,6 millones fueron a para a las cuotas para sindicatos y colegios profesionales.