El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo ha mostrado su "sorpresa" y "preocupación" ante el anuncio de Alcoa de cerrar sus factorías de A Coruña y Avilés y le ha solicitado que abra un proceso de negociación para buscar alternativas a fin de mantener la capacidad productiva de ambas plantas.

El departamento de Reyes Maroto ha señalado que durante los contactos mantenidos en los últimos tres meses la multinacional norteamericana nunca había informado de que podía adoptar una decisión en este sentido, tal y como finalmente ha trasladado al ministerio esta mañana de "manera unilateral".

Ante el anuncio de cierre de ambas plantas, la ministra de Industria ha hablado con los presidentes de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y el Principado de Asturias, Javier Fernández, así como con los alcaldes para trabajar de forma conjunta en el mantenimiento de la capacidad industrial y el empleo en la zona y ha anunciado en su cuenta de Twitter que mantendrán una reunión en los próximos días.

Además, el Ministerio de Industria ha solicitado a Alcoa más información para contribuir a buscar una solución a esta situación, motivada por la falta de inversiones y los problemas estructurales heredados desde 2014, según ha indicado en un comunicado.

También le ha trasladado a la empresa que inicie un proceso de negociación para buscar alternativas con el objetivo de mantener la capacidad productiva de ambas plantas.

En este proceso, ha agregado el ministerio, el Gobierno trabajará junto con el resto de administraciones públicas afectadas y los agentes sociales.

Alcoa ha justificado hoy estos cierres asegurando que las plantas de A Coruña y A Coruña son las menos productivas del grupo debido a problemas estructurales que atraviesan, tanto productivos como tecnológicos, a lo que se suman las pérdidas "significativas" que registran ambas instalaciones y que la compañía espera que continúen previsiblemente.

La compañía sostiene que los análisis realizados sobre la situación productiva de las operaciones en España concluyen que se podrían conseguir mejoras organizativas con el cese de la producción en A Coruña (369 empleados) y Avilés (con 317 trabajadores), manteniendo la producción en una sola planta, la de San Cibrao, que produce tanto aluminio como alúmina.

En este proceso, la compañía se ha comprometido a trabajar para reducir el impacto de este proceso en los empleados y a negociar un plan social con los representantes de los trabajadores que permita alcanzar el "mejor" acuerdo para las partes "consciente de la repercusión humana y social de este anuncio".

Alcoa también ha indicado que "en un intento por superar estas condiciones adversas, ha hecho importantes esfuerzos" en los últimos años para reducir costes en las plantas de A Coruña y Avilés y mantener el empleo.

Sin embargo, señala la empresa, debido a una tecnología más antigua y menos eficiente, a la economía de escala y a otros factores, estas plantas continúan sin ser competitivas.