La plantilla de Alcoa en A Coruña "va a luchar hasta el final" para evitar el despido colectivo y el cierre de las fábricas coruñesa y avilesina y ha intensificado las protestas para exigir medidas a las administraciones y autoridades implicadas en la búsqueda de soluciones a esta situación. Varios centenares de trabajadores de la planta de A Grela y vecinos de la ciudad se concentraron ayer en la rampa de la Torre de Hércules en protesta por el cierre de la factoría y el expediente de regulación de empleo (ERE) de extinción presentado para sus 369 trabajadores, unas medidas que la multinacional estadounidense también aplicará en la fábrica de Avilés, con 317 empleados. La mayoría de los participantes en la protesta lucía las habituales camisetas naranjas con el lema Peche non, enerxía solución, una reivindicación ( Alcoa. Peche non) que los trabajadores también mostraron portando varios carteles en la rampa de acceso al monumento coruñés Patrimonio de la Humanidad.

El presidente del comité de empresa de A Coruña, Juan Carlos López Corbacho, apremió a las administraciones a adoptar medidas de forma inmediata para frenar el expediente de regulación de empleo y evitar el cierre de las instalaciones. Alcoa dio por iniciado el periodo de consultas del ERE el pasado 31 de octubre, por lo que a principios del próximo mes podría aplicarlo ya -haya acuerdo o no con los representantes sindicales- si las autoridades laborales no lo tumban. "Cada vez queda menos tiempo y hay que poner iniciativas encima de la mesa", apremió López Corbacho, que considera que, ante la "prepotencia" de la empresa, el Gobierno debería aplicar el artículo 128.2 de la Constitución y expropiar las factorías que están en riesgo.

El representante de los trabajadores coruñeses resaltó que el sector del aluminio es "estratégico" y que tanto la planta de A Coruña como la de Avilés son viables, por lo que instó a las administraciones a adoptar medidas para que puedan mantener su actividad y que los casi 700 profesionales que dependen de ellas y sus familias puedan respirar tras semanas de gran tensión.

Tumbar el ERE

"El primer mensaje y más importante que hay que dar de la situación actual es que hay que retirar el ERE, algo sobre lo que las cinco administraciones [Gobierno central, Xunta, Principado, Concello de A Coruña y Ayuntamiento de Avilés] están de acuerdo, y sacar las plantas adelante", sentenció el presidente del comité de empresa de la fábrica coruñesa, que asegura que solo hay tres escenarios posibles: que la empresa empiece a colaborar en la búsqueda de alternativas, que las autoridades laborales tumben el ERE por vulnerar la legislación vigente y que la Administración decida intervenir las fábricas para buscar alternativas de futuro. "Compradores seguro que hay porque los productos de calidad que salen de estas fábricas no los hay en ninguna otra", concluyó López Corbacho.

Los representantes de los trabajadores también remarcan que la solución definitiva al problema no puede limitarse a conceder ayudas a corto plazo a la industria, pero confían en que las compensaciones comprometidas por el Gobierno sirvan para la retirada del ERE y para el establecimiento de conversaciones futuras encaminadas al mantenimiento de la actividad. "Ya no vale conceder ciertas ayudas sin compromiso de permanencia y no se puede permitir que a gente que viene a extorsionar se le permita despedir con el dinero público recibido", sentenció el líder de la plantilla de la factoría de A Grela.