Alta tensión en las Bolsas por las fricciones comerciales entre Estados Unidos y China. El mercado español se vio arrastrado y perdió un 2,75% en la que fue su peor sesión desde la crisis catalana de octubre de 2017. La chispa que encendió el nerviosismo de los inversores estalló tras la detención en Canadá de la hija del fundador y directora financiera de la compañía china Huawei, Meng Wanzhou, por orden de las autoridades estadounidenses, acusada de transgredir la política sanciones de EEUU sobre Irán y otros países.

El Gobierno chino ya ha pedido la liberación inmediata de Wanzhou y, de no producirse, amenaza con echar por tierra el pacto de no agresión arancelario que había alcanzado con Washington durante la cumbre del G20 en Buenos Aires (Argentina) hace solo una semana. Según algunos diarios norteamericanos, Huawei habría podido enviar productos elaborados en sus factorías estadounidenses a Siria, lo que rompe la normativa vigente de exportaciones americanas, que lo prohíbe estrictamente.

De hecho, la detención se produjo el mismo día en el que el presidente de EEUU, Donald Trump, y el de China, Xi Jinping, cenaban en la ciudad argentina para cerrar esa tregua comercial que iba a ser temporal, durante solo un mes y medio. La reacción de las autoridades chinas ha tardado poco en llegar. "Exigimos a las dos partes (EEUU y Canadá) que aclaren cuanto antes el motivo de este arresto", afirmó ayer Geng Shuang, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, quien pidió la puesta en libertad "inmediata" de Meng Wanzhou.

La embajada china en Ottawa ya había emitido una nota de protesta contra la detención de la directiva, pidiendo su liberación. "La parte china se opone firmemente y protesta enérgicamente por este tipo de acciones que perjudican gravemente los derechos humanos de la víctima", indicó en un comunicado, en el que se indica que Meng "no violó ninguna ley estadounidense o canadiense".

La propia compañía de telecomunicaciones Huawei aseguró que cumple con todas las leyes y regulaciones aplicables en los países en los que opera, incluidas las leyes y regulaciones sobre el control y sanción de las exportaciones de las Naciones Unidas, EEUU y la UE.

Este terremoto en política exterior sacudió a las Bolsas de todo el mundo. La española, por ejemplo, retrocedió hasta niveles de finales de octubre y amplió las pérdidas acumuladas en lo que va del año al 12,74%. En la jornada de ayer, además, la Bolsa de Londres cayó un 3,58%; la de Milán un 3,54%; la de Fráncfort un 3,48% y la de París un 3,31%. En Asia, la de Hong Kong se desplomó un 2,47%; Tokio cayó casi un 2%; Shanghái cedió un 1,68% y Seúl, un 1,55%.