Cerca de 25.700 contribuyentes gallego aún esperan por el dinero del impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) correspondiente a la devolución de la declaración de 2017 (presentada en 2018). Son los últimos en cobrar de la Agencia Tributaria, que en sus casos ha rebasado el plazo legal establecido para hacer los pagos. La mayoría de tales contribuyentes tendrán por ello derecho a ser resarcidos con intereses de demora que empezaron a contar el 3 de enero.
La legislación determina que la Agencia Tributaria abonará las cantidades debidas a los ciudadanos con derecho a devolución del IRPF (declaraciones con resultado negativo) en un plazo que no debe superar los seis meses posteriores al cierre de la campaña, que el pasado año llegó hasta el día 2 de julio. Lo habitual es que la gran mayoría de los pagos se realice antes ya de que termine la presentación de las declaraciones. El uso cada vez más intensivo de internet para liquidar el impuesto (a través del portal Renta Web) hace muy frecuente que la devolución sea recibida dentro de la campaña y sólo unos días después de haber formalizado la liquidación de la renta.
Pero hay una parte de los contribuyentes, pequeña en términos relativos, aunque formada por cientos de miles de personas en todo el país, para las que el dinero no llega en el plazo legal. Según una información divulgada estos días por el Ministerio de Hacienda, la situación es la que se sintetiza en los siguientes puntos en Galicia y en el conjunto de las regiones no forales (todas salvo País Vasco y Navarra, que recaudan directamente el IRPF).
EEl país. Las devoluciones solicitadas en la última campaña de la renta fueron 13,97 millones y, a fecha de 4 de enero de este año, quedaban por abonar unas 477.000, por un importe total de 687 millones de euros. La proporción de devoluciones efectivamente realizadas es del 96,59% y la del importe pagado, del 93,14% del total.
ELa comunidad. En Galicia, hay 25.682 personas pendientes de la devolución del Fisco. Suponen el equivalente al 2,9% de todas las declaraciones con derecho a devoluciones que fueron formalmente solicitadas (891.055). El dinero pendiente de recibir por esos gallegos asciende a 37,5 millones, de forma que la cantidad media a la que tienen derecho ronda los 1.460 euros. ¿Por qué se retrasan los pagos a esos contribuyentes? Hay una variada casuística, según los comentarios de expertos y las publicaciones sobre el tema. La demora puede producirse por el hecho de que la declaración esté siendo objeto de comprobación por Hacienda para verificar que los ingresos manifestados se corresponden con los reales. Las comprobaciones son frecuentes también, por ejemplo, cuando existen diferencias relevantes respecto a las declaraciones de años precedentes. La demora también es común si se detectan errores en los datos personales del contribuyente, como cambios de domicilio que no han sido comunicados, o en supuestos de devoluciones particularmente elevadas. La Agencia Tributaria dispone de un servicio en su página web en el que se puede consultar el estado de cada declaración: si aún se está tramitando, si se está comprobando o si ha sido tramitada favorablemente, con lo que la devolución estaría cercana.
Lo normal es que, finalmente, el dinero llegue, aunque sea con retraso y, en buena parte de los casos, con una pequeña compensación si se ha superado el plazo legal. La normativa tributaria determina que se pague un interés equivalente al 3,75% anual (interés legal de demora) por el tiempo transcurrido entre el 2 de enero y el día en que se hace efectiva la devolución, salvo que el retraso sea imputable a un error o infracción del contribuyente.
