El comité de empresa de la central térmica de Meirama solicitó ayer a la dirección de Naturgy "más inversión" para garantizar "que se mantengan los puestos de trabajo una vez se haya desmontado" la infraestructura.

Al término de una reunión con los directivos, el presidente del comité de empresa, Bautista Vega, solicitó que "se instale alguna tecnología, ya sea biomasa o eólica, que permita mantener la producción y que no se pierdan los puestos de trabajo".

La compañía ha diseñado "un plan de adecuación de la plantilla" que prevé que 40 de los 77 empleados sigan vinculados a la empresa, ya sea participando en los trabajos de desmantelamiento o siendo ubicados en otras unidades de la compañía "siempre en territorio gallego". El resto de trabajadores se desvincularían de la eléctrica a través de salidas pactadas, una especie de prejubilación, para los mayores de 55 años.

La propuesta de Naturgy de ubicar en Cerceda un parque eólico y un centro avanzado de gas renovable (biogás) satisfaría al comité de empresa "siempre que se mantengan los puestos de trabajo". "Siempre hemos defendido la viabilidad del carbón, pero si la empresa no invierte en eliminación de contaminantes; descartada esa posibilidad, le pedimos esa alternativa a Naturgy y esperamos que la Xunta de Galicia intervenga", añadió.

Los directivos de Naturgy han dicho que "siguen estudiando nuestra propuesta y que nos informarán de futuros avances", comentó Vega, quien señaló que las peticiones de cierre como la trasladada por la empresa al Ministerio de Transición Ecológica "suelen tardar cerca de un año en resolverse".

El mayor problema radica en los trabajadores de las empresas auxiliares. El compromiso de Naturgy en este sentido es "seguir contando con nuestros proveedores".