Facua-Consumidores en Acción presentó ayer denuncias contra Cabify -que opera en A Coruña- en Galicia y otras cuatro comunidades autónomas en las que opera en España porque considera que la empresa vulnera la legislación de defensa de los consumidores y la que regula a las agencias de viajes.

Facua estima que las condiciones contractuales de la filial española de Cabify (Maxi Mobility Spain) ponen a los usuarios en una situación de "absoluta indefensión" en caso de irregularidades en los servicios contratados, como retraso de los transportistas, cargos superiores a los ofertados o daños por accidentes.

La asociación asegura que Cabify corrigió esta semana algunas de las "irregularidades" pero mantiene "las de mayor envergadura", por lo que les denunciaron en Galicia, Andalucía, Cataluña, Madrid y Comunidad Valenciana.

Asimismo, Facua interpuso otra denuncia ante la Dirección General de Turismo de la Comunidad de Madrid, donde Maxi Mobility Spain tiene su sede social. Cabify, que tiene vehículos en A Coruña, Alicante, Barcelona, Madrid, Málaga, Sevilla y Valencia, advierte en sus "condiciones generales de uso" de que opera en España como "agencia de viajes" al estar registrada como tal, explica la asociación.

En el apartado 8 de sus condiciones contractuales, dedicado al "régimen de garantías y de responsabilidad", la empresa afirma que "la prestación final del servicio de transporte quedará a discreción del tercero transportista" y que "el usuario renuncia y exonera a Cabify de cualesquiera obligaciones, reclamaciones o daños surgidos como consecuencia de la relación con el tercero transportista".

La asociación valoró que con estas prácticas, la multinacional vulnera tanto la normativa de consumo como la que regula las obligaciones de las agencias de viajes. "Cabify pretende aparentar que es un mero intermediario, obviando sus obligaciones como agencia de viajes y como si no hiciese otra cosa que poner en contacto a un usuario con una empresa para que contrate sus servicios", criticó la asociación.

Propuesta rechazada

Los taxistas de Madrid mantienen la huelga indefinida, que cumplió ayer cinco días, al considerar "totalmente insuficiente" la propuesta pactada por la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de la capital para regular la actividad de los vehículos de alquiler con conductor (VTC).

Después de reunirse con la alcaldesa, Manuela Carmena, el presidente de la Federación Profesional del Taxi, Julio Sanz, afirmó que el borrador de la propuesta "no se parece en nada" a las peticiones del colectivo de taxistas. Según el borrador, de nueve páginas, el usuario de un VTC debe encontrarse a una distancia mínima de 300 metros del vehículo para poder contratarlo.