La entidad financiera Abanca participó ayer en Nueva York en un acto con más de 80 empresarios, en el que tuvo la oportunidad de presentar su estrategia de negocio internacional, que se extiende ya por diez países de Europa y América, tras el reciente inicio de operaciones en el mercado estadounidense.

Durante el evento, organizado conjuntamente con la Xunta de Galicia y la Cámara de Comercio España-EEUU, la directora de Abanca en Estados Unidos, Mónica Vázquez, reiteró ante los asistentes el "firme compromiso del banco con Galicia y con su tejido productivo". Vázquez resaltó la "marcada vocación internacional" de la entidad financiera, desarrollada para dar servicio a los gallegos residentes en otros países y a las empresas con actividad de comercio exterior.

Según explicó, Abanca presta este servicio internacional a través de un "modelo de atención diferencial en el mercado que pone a disposición de los clientes su oficina en su país de residencia, su oficina en España, apoyada por un equipo de gestores de no residentes y, en el caso de las empresas, también de un amplio equipo de profesionales especializados en comercio exterior". "Esta atención basada en la personalización y la especialización -subrayó- se complementa con una oferta de productos y servicios adaptados para dar respuesta a las necesidades de particulares y empresas en el extranjero".

Abanca abrió en diciembre de 2018 en Miami su primera oficina en el mercado norteamericano, tras recibir autorización de la Reserva Federal de Estados Unidos, para prestar servicios financieros en cualquier área geográfica del país. Desde este centro en el Estado de Florida, la entidad financiera gallega pretende dar "un servicio exclusivo y personalizado tanto a empresas como a particulares". La oficina quiere ofrecer una "atención prioritaria" a las compañías gallegas y españolas que operan o quieren radicarse en el mercado estadounidense y en América Latina, y al colectivo de no residentes latinoamericanos, españoles y portugueses. Portugal es otro de los países de referencia de la entidad tras la compra la filial lusa de Deutsche Bank.