El interés del Grupo Alibérico en comprar las factorías de Alcoa en A Coruña y Avilés, publicado en octubre por este diario, lleva el sello de un empresario de origen gallego, el compostelano Clemente González Soler. Conocido como El rey del aluminio español, Soler es fundador, propietario y presidente de Alibérico, el grupo industrial y tecnológico especializado en la fabricación de productos semitransformados del aluminio.

Ayer, sin mencionarlo expresamente, el presidente de la Confederación de Empresarios de A Coruña (CEC) y portavoz de la patronal gallega, Antonio Fontenla, volvió a reiterar en una entrevista en la Radio Galega -es la segunda vez que se expresa en la misma línea, la primera fue en noviembre-, que un "un empresario gallego" le ha mostrado su interés en comprar Alcoa, en referencia a la factoría coruñesa y a la asturiana de Avilés.

Fontenla se mostró optimista sobre la posibilidad de encontrar un inversor para la aluminera coruñesa y asturiana antes del 1 de julio, fecha fijada en el acuerdo entre la empresa y los trabajadores para materializar la venta o la reindustrialización de las factorías. "Yo creo que hay posibilidades, lo sé y lo dije hace meses, y aún me lo ratificó hace poco tiempo en una reunión en Madrid un empresario gallego que tiene interés en comprar", dijo antes de añadir que "lo que debemos saber es si Alcoa tiene interés en vender o no, si le interesa tener un competidor".

La competencia, en este caso, constituye un elemento importante de cara a la firma norteamericana, puesto que Alibérico es un grupo industrial y tecnológico especializado en la fabricación de materiales avanzados de aluminio, considerado todo un referente a nivel mundial dentro del sector.

El interés del grupo liderado por Clemente González Soler para hacerse con Alcoa viene de lejos. Alibérico ya contactó con la empresa con sede en Pittsburgh en mayo del año pasado para ofrecerse como comprador y su propuesta resultó descartada. Ahora, sin embargo, cuenta con tres bazas fundamentales a su favor: por una parte, el Gobierno central se ha comprometido a buscar un inversor junto a las administraciones autonómicas antes del 1 de julio; por otra, su origen gallego y su relevancia en el sector constituyen un aval ante los trabajadores, que siempre han manifestado su disposición a enrolarse en un proyecto serio que apueste por la producción de aluminio.

En este sentido, Alibérico es el primer grupo privado en Europa de capital español del sector del aluminio y está formado por 35 empresas y 17 fábricas distribuidas en cuatro continentes que dan trabajo a más de 1.200 personas. Opera en los sectores de envase y embalaje, edificación, tratamiento de superficies, transporte, industria y renovables y está especializado en reflotar empresas que atraviesan por momento críticos.El interés de Alibérico por Alcoa, sin embargo, no es el único que ha trascendido en los últimos meses, caso de Klesch Group, con sede en Suiza y controlado por el millonario estadounidense Gary Klesch, o de Aludium.

Por otra parte, Fontenla también señaló que la situación de Alcoa, Ferroatlántica e Isowat constatan que "se está viendo un cierto desmantelamiento industrial" en Galicia y España, y criticó el elevado coste de la energía, "mucho más cara que en otros países".