Las matriculaciones de vehículos arrancaron el primer trimestre con un descenso interanual del 12% en la comunidad gallega, provocado por un desplome del segmento de diésel que lleva desde septiembre sin pisar el freno. Aunque las ventas de vehículos a gasolina sí repuntaron (9,11%), no sirvieron para contrarrestar el mal momento que vive el gasóleo y que el sector atribuye a la entrada en vigor del nuevo protocolo de emisiones (Worldwide Harmonized Light Vehicles Test Procedure, WLTP), a los mensajes „a veces contradictorios„ lanzados desde el Gobierno central y al cerco impulsado por las principales ciudades a su circulación.

Este abanico de factores se suma a la ausencia de un plan de achatarramiento y renovación, y tiene una consecuencia clara: el parque de vehículos en Galicia envejece a marchas forzadas y casi la mitad (45%) tienen más de quince años, según los datos oficiales de la Dirección General de Tráfico (DGT).

La gallega es la tercera comunidad con coches más antiguos en circulación, solo por detrás de Extremadura y Castilla y León, en ambos casos con más de un 46% de su parque móvil con más de 15 años.

De acuerdo a la información disponible hasta febrero, el envejecimiento de los coches gallegos no se había acelerado tanto desde 2016, justo cuando terminó la octava „y última„ edición del Plan PIVE (Programa de Incentivos al Vehículo Eficiente). En el último ejercicio la cifra de turismos matriculados que superan los quince años se incrementó por encima de un 6%; en comparación con la tasa de envejecimiento experimentada durante 2018 (+5%), ésta ha crecido de forma relativa en casi treinta puntos.

Es más, la ratio de vehículos de esta edad en la comunidad gallegase ha duplicado respecto al año 2010, cuando representaban poco más del 24% de todo el parque. Entonces la comunidad también era la tercera con los vehículos más antiguos, también por detrás de los castellano-leoneses y extremeños. En el lado opuesto figura Madrid, la comunidad con el parque más lozano: casi el 70% de los coches matriculados allí tiene menos de tres lustros.

Programas públicos

La vetustez de los turismos es incompatible con la lucha contra las emisiones de gases contaminantes, como defiende el sector, de modo que la pelea contra el cambio climático se perderá por más que mejore la eficiencia de los sistemas de combustión. Y de ahí la reclamación de nuevas iniciativas públicas como el extinto PIVE o como la que ha lanzado el Gobierno vasco; allí las ventas se incrementaron por encima de un 21% en marzo, frente al descenso nacional del 12,2% (y del 9,7% en Galicia). "Son estas estrategias positivas y no prohibicionistas que entendemos que son las más idóneas para estimular la demanda de vehículos de bajas emisiones y renovar el parque", vaseguró la responsable de Comunicación de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), Noemí Navas. "Los clientes necesitan un mensaje de tranquilidad como el que se ha lanzado desde el País Vasco, que está dinamizando el mercado y achatarrando los coches más antiguos sin dejar de lado ninguna tecnología disponible", expuso su homólogo en la federación nacional de concesionarios (Faconauto), Raúl Morales.

Pese a que las ventas no experimentaban una racha tan negativa desde finales de 2008, la recaudación del fisco por el Impuesto de Matriculación no se ha resentido. Entre enero y febrero „no hay datos tributarios de marzo todavía„ el Estado ingresó 3,7 millones de euros por este gravamen, por los 3,07 millones del mismo periodo del año pasado. Y eso que se matricularon casi un millar de coches menos, pero la cuota media a ingresar por cada uno pasó de 363 a 492 euros. El tirón de los todocamino (sport utility vehicle o SUV) y el auge de los modelos de alta gama salvó, aquí sí, las cifras de Hacienda