Trabajadores de la planta que la multinacional Alcoa tiene en el municipio lucense de Cervo, en San Cibrao, se concentraron esta mañana ante la factoría, convocados por la CIG para reclamar un precio de la energía que garantice la supervivencia de la planta y, en consecuencia, el mantenimiento de los empleos en este centro de trabajo.

El presidente del comité de empresa de la fábrica y miembro de la CIG, Xosé Paleo, reconoció que la concentración de hoy sumó en las ultimas horas un nuevo motivo, dado que el "el Gobierno ha incumplido su promesa de dar solución al problema" que genera "el precio de la energía", con lo que los trabajadores se quedan "sin perspectivas de futuro a largo plazo".

"Para las electrointensivas, la energía es parte de la materia prima que se utiliza para trabajar y en cuanto a la industria del aluminio, supone el 40% de los costes de producción", precisó Paleo a los medios de comunicación.

En ese sentido, afirmó que el actual precio de la energía "hace inviable competir en un mercado global" con países en los que el precio de la electricidad es más barato.

En cuanto a la postura del Gobierno, lamentó que, llegados a este punto, "ponga excusas", porque "si tuviese una solución, el mejor momento para plantearla sería ahora, al final de una campaña electoral".

Como no lo ha hecho, a los trabajadores eso les hace "pensar que no tiene esa solución".

"El escenario que se nos presenta es pésimo", dijo Paleo, porque "aboca a las fábricas de A Coruña y Avilés al cierre" y deja sin "perspectivas de futuro" a San Cibrao.

En la protesta participaron también el secretario general de la CIG, Paulo Carril; el secretario nacional de CIG Industria, Xoán Xosé Bouzas; el secretario comarcal, Antonio Niño; y el responsable del sindicato en A Mariña, Xorxe Caldeiro.