Los 72 trabajadores de Isowat Made en A Coruña tienen esperanzas de esquivar la liquidación y volver a sus puestos de trabajo. La empresa ferrolana Detegasa y un segundo inversor facilitado por la Xunta „que prefiere mantener el anonimato„ han trasladado al administrador concursal su interés por la planta de diseño y fabricación de componentes eléctricos de A Grela. El comité de empresa espera que las ofertas de compra se concreten "la próxima semana", una vez que el Juzgado de lo Mercantil número 2 de A Coruña „encargado del proceso de liquidación„ ha desbloqueado la venta del otro centro de trabajo de esta filial del holding gallego Invertaresa, en Medina del Campo (Valladolid). "Ahora el administrador podrá dedicarse a resolver el problema de A Coruña", expone el presidente del comité coruñés, Cándido López.

La plantilla castellana corrió mejor suerte que la gallega en la subasta de las unidades productivas que la juez coruñesa cerró en enero. Industrias Mecánicas de Extremadura SA (Imedexsa) se adjudicó la planta de Medina, con facilidades de financiación por parte de la Junta de Castilla y León, con el compromiso de mantener la actividad y el empleo. Para A Coruña, en cambio, no llegó ninguna oferta por la unidad productiva. El traspaso de Made (como se conoce a la planta vallisoletana) se complicó a raíz de un recurso de la Tesorería de la Seguridad Social, que reclamó que la nueva dueña pague la deuda de las cotizaciones pendientes. El juzgado le dio la razón el martes y ayer comenzaron los trámites para formalizar la venta.

El cierre de esta operación permitirá avanzar en la solución para la planta de A Grela y tiene además una segunda implicación para los trabajadores coruñeses, que esperan que con esta inyección de liquidez Isowat haga frente a las cinco nóminas y media que tienen pendientes de cobro. La empresa les adeuda una paga extra y el sueldo ordinario desde noviembre hasta mediados de marzo. En esa fecha, los operarios pasaron a cobrar el paro, en virtud del expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) de tres meses que aprobó el juzgado para mitigar el endeudamiento de la compañía y aliviar la precaria situación económica de la plantilla. Este despido colectivo temporal termina el 10 de junio y determinará los plazos para salvar Isowat. "Si para esa fecha no hubiese una oferta con visos de realidad lo más probable es que es administrador optara por la liquidación", asume Cándido López.

Con poco más de un mes de margen, el tiempo apremia pero la plantilla „que mantiene su movilización contra el cierre en las calles„ tiene esperanza. "Esperamos que haya ofertas de posibles inversores la próxima semana", anticipa el representante sindical, quien añade que todavía no ha tenido ocasión de reunirse con los posibles compradores. Detegasa, empresa de Ferrolterra integrada en el grupo Argos que fabrica equipos marinos e industriales, contactó con la administración concursal desde el primer momento, pero inicialmente solo mostró interés por la producción de Isowat orientada a defensa, más alineada con su orientación militar. "Ahora no sabemos si presentará oferta por todo o por una parte", señala López, que recuerda que si bien las ofertas deben ser por la unidad productiva (y no solo por maquinaria, como sucedió con la propuesta fallida de Sarpel), el inversor "podría quedarse solamente con unos pocos trabajadores". La segunda firma en liza se ha incorporado recientemente.

Isowat solicitó el concurso de acreedores voluntariamente en mayo asfixiada por deudas que rondan los cien millones de euros (principalmente con Abanca).