Si ha recibido un correo electrónico que dice: "Estimado contribuyente, después del último cálculo anual de su actividad fiscal hemos determinado que a usted le corresponde un reembolso de (y una cantidad que ronda los 300 euros)", tenga cuidado porque se trata de una estafa. El timo del IRPF. El objetivo de los ciberdelincuentes es del robar datos sensibles al descuidado contribuyente, entre ellos el número de cuenta o de la tarjeta de crédito con el que intentar desplumarle.

La Policía Nacional lanzó hace unas semanas una campaña a través de sus redes sociales alertando de este intento de estafa. "Estamos en plena campaña de la Renta, así que, especial cuidado. Nunca debes introducir tus datos personales o bancarios como respuesta a ningún correo electrónico de alguien que no conoces y que no has solicitado", advertían los agentes.

Estos delincuentes suelen lanzar con bombas de racimo a la espera de que alguien pique el anzuelo, pero los expertos aseguran que los sistemas que emplean suelen ser bastante "burdos". La recomendación de la Policía es la de ni si quiera abrir ese correo, ya que la Agencia Tributaria no suele, a no ser que haya una petición previa, comunicarse con los contribuyentes mediante esta vía. "Lo mejor es borrarlo directamente y añadir la dirección a la lista de no deseados", señaló ayer uno de los agentes. Aunque siendo un poco avispado es fácil identificar fallos en el correo, generalmente en la redacción o en la imagen del Fisco.

La propia Agencia Tributaria tiene en su página web una serie de recomendaciones para no picar el anzuelo y en la que se recoge una lista de cuáles son los dominios que usa el Fisco en internet. "La mejor medida es la prevención", asegura Hacienda.

El Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe) viene publicando durante las últimas semanas varias alertas de seguridad con casos de phishing que tratan de suplantar la identidad de algunas entidades financieras (como BBVA, ING o Caja Rural, entre otras).

Para todos esos casos la recomendación es la misma: "No abrir correos de usuarios desconocidos o que no se hayan solicitado previamente. Hay que eliminarlos directamente". Como pista el Incibe también añade que los correos que envían los bancos no contienen enlaces a sus páginas de inicio o documentos adjuntos.