El número de millonarios se mantiene prácticamente invariable en España, 224.000, el equivalente a la población de la ciudad de A Coruña. El último Informe Mundial de la Riqueza de Capgemini, divulgado ayer, contabiliza 224.300 ricos españoles, lo que representa un incremento por debajo del 0,1% respecto a la cifra de 224.200 de 2017.

España se mantiene en el decimocuarto puesto en la clasificación mundial de países en cuanto a población millonaria -por detrás de La India (256.000) y Corea (235.000) y por delante de Rusia (200.000) y Arabia Saudí (191.000)- y en séptimo lugar en Europa (antes están Alemania, Francia, Reino Unido, Suiza, Italia y Países Bajos y después, Noruega y Suecia).

A diferencia de España, la riqueza de las grandes fortunas disminuyó un 3% a escala mundial en 2018 como consecuencia de la caída de los mercados de renta variable y la ralentización de las economías regionales.

Según el mencionado estudio que audita anualmente el estado mundial de las fortunas, la caída más acusada es la de Asia-Pacífico y, en especial, de China, país que aglutina una cuarta parte de la reducción de la riqueza en todo el mundo. Los ultramillonarios, aquellos que, como el dueño de Inditex, Amancio Ortega, disponen de patrimonios superiores a los 30 millones de dólares, son los más afectados: suponen el 75% de la reducción total del patrimonio de las grandes fortunas.

VOLATILIDAD

La composición de las carteras de inversión, señala el informe elaborado por Capgemini, ha cambiado de manera significativa: el efectivo ha sustituido a la renta variable como clase de activo más utilizado como inversión en el primer trimestre de 2019 y representa el 28% del patrimonio financiero de las grandes fortunas, mientras que las acciones han pasado a una segunda posición, con cerca del 26% (5 puntos porcentuales menos que el año anterior). La volatilidad en los mercados bursátiles dio lugar a un ligero incremento de las inversiones alternativas, que llegaron al 13%, 4 puntos porcentuales más que doce meses antes.