Tan solo cuatro días después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, anunciase nuevos aranceles a productos de China, la divisa de este país, el yuan, rompió la barrera psicológica de las siete unidades por cada dólar, algo que no pasaba desde abril de 2008. Los analistas apuntan que el Banco Popular de China (BPC, central) ha dejado caer conscientemente el valor de la moneda, mientras que la institución asegura que todo es cosa del mercado, aunque reconoce que la bajada tiene relación directa con "las medidas unilaterales y el proteccionismo comercial", así como por "la imposición de subidas arancelarias contra China", según escribió un portavoz en la web del organismo, en referencia al último giro de la guerra comercial entre Pekín y Washington desde marzo de 2018.

Aunque no las especificó, Pekín había prometido "represalias" después de que Trump indicase que impondría tasas del 10% a productos chinos valorados en 300.000 millones de dólares a partir del 1 de septiembre.

Trump no dudó en calificar de "manipulación" el desplome de la moneda china. "China bajó el precio de su moneda a un mínimo histórico. Se llama "manipulación monetaria". ¿Estás escuchando Reserva Federal? ¡Esto es una violación importante que debilitará en gran medida a China con el tiempo!", escribió en Twitter. La nueva batalla de la guerra comercial tiñó de rojo a las Bolsas.