Pescanova S.A. no es ni la sombra de lo que fue. Convertida en una mera sociedad instrumental con el 1,65% del capital de Nueva Pescanova, su balance periódico de cuentas suele dejar poco más que la mayor o menor reducción de las pérdidas operativas. El del último semestre, sin embargo, trae bajo el brazo un importante aumento de la hucha. A la vuelta de la esquina está el macrojuicio contra su excúpula por las supuestas irregularidades que desembocaron en la quiebra y la vieja Pescanova duplica provisiones: pasan de 15 millones de euros a 29,9 millones; pero da por hecho que pagará todo Nueva Pescanova.
