La reducción de plantilla, todavía por cuantificar, del ERE (expediente de regulación de empleo) de Isidro 1952 „antigua Isidro de la Cal„ no será la única medida del plan de ajuste. El comité de empresa se prepara también para una propuesta de bajadas de sueldo y recorte de los derechos que marca su convenio. En espera de que la firma pesquera coruñesa concrete su posición, la plantilla estudia ya movilizaciones para defender sus empleos.

Los representantes de los 225 empleados de la antigua Isidro de la Cal en el polígono de Espíritu Santo (Cambre) y los otros cinco centros de trabajo de la firma pesquera coruñesa se reúnen hoy para cerrar la composición de la mesa sindical y proponer una fecha para el inicio de la negociación del ERE, probablemente en esta misma semana. De los trece miembros, ocho serán de la planta Cambre „ubicación principal, donde la compañía se dedica a preparar sushi„ y otros cinco de las piscifactorías de truchas de Carballo, Baio y Louro; el criadero de rodaballo de Lorbé; y el criadero de besugo de Valdoviño.

La compañía comunicó la semana pasada el ajuste de plantilla, alegando un descenso de la carga de trabajo y problemas financieros. "Creemos que van a querer tocar el convenio para bajar los sueldos y recortar nuestros derechos", avanza la presidenta del comité de la planta de Cambre, Olga Rodríguez, quien indica que el colectivo está ya preparando posibles movilizaciones ante un ajuste que según su previsión puede suponer el despido de la mitad de la plantilla y la precarización del resto.

La compañía dirigida por Pablo García-Gascó defiende que el objetivo es salvar la empresa y el máximo número de empleos posibles, sin cuantificar los despidos. "Me parece que no vamos a llegar a ningún acuerdo", anticipa Olga Rodríguez, quien admite que la desconfianza se ha instalado entre la plantilla. "La gente está muy quemada de la mala gestión", afirma.