La desaceleración de la economía de la zona euro está tocando fondo y observan signos de estabilización, lo que da esperanzas de un rebote de la actividad desde mediados de 2020, según el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos.

El exministro aseguró que algunos de los riesgos e incertidumbres para las expectativas de crecimiento, como un Brexit desordenado y la guerra comercial, no se han materializado, mejorando la percepción de los mercados. "Lo positivo es que la estabilización se está produciendo con un crecimiento muy bajo de la economía", dijo.