El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha reconocido que sus actividades de reestructuración y otras ordinarias han derivado en un impacto patrimonial negativo que ha alcanzado los 45.640 millones de euros. Mientras, el total de fondos inyectados en el sector bancario ha ascendido a 58.685 millones de euros, el 4,86% del Producto Interior Bruto (PIB), según consta en el informe 10 años del Frob 2009-2019 publicado ayer por el organismo. Hasta el momento, el FROB ha recuperado 5.917 millones, que han correspondido a las devoluciones de entidades como los 873 millones de euros derivados de la venta de Novagalicia a Banesco. Entre el resto de operaciones destacan la de Banca Cívica (1.142 millones de euros), CajaSur (803 millones de euros) o BFA-Bankia (346 millones de euros).

A 30 de junio de 2019, el FROB mantenía una participación directa en BFA del 100% e indirecta en Bankia a través de BFA del 61,77%. Por esta posición, junto a la de Sareb, estima que podrían recuperarse 9.729 millones de euros. No obstante, precisa que las ayudas definitivamente recuperadas dependerán de la evolución y desinversión final en las participadas. El presidente del FROB, Jaime Ponce, asegura que el balance del organismo arroja un "buen servicio".