El candidato a la presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, se comprometió ayer a poner en marcha un Instituto de Transición Justa para ayudar a las comunidades afectadas por el cierre de la cuencas mineras y centrales nucleares, como es el caso de Galicia. El municipio de As Pontes, en la comarca del Eume, sufrirá un enorme varapalo económico con el cierre de la que es la mayor central térmica de carbón de España, para la que la que Endesa solicitó, el pasado diciembre, permiso para cerrar. Trabajadores directos e indirectos (principalmente los transportistas del carbón) reclaman, junto a las instituciones locales, soluciones para paliar la este daño.

Sánchez afirmó que su Ejecutivo "estará en la primera línea con la transición ecológica" y se comprometió a aprobar la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, con unos "objetivos ambiciosos". Entre ellos, que en el 2050 toda la electricidad sea de origen 100% renovable.