Unas mil personas según los convocantes, y 500 según la Policía Local, se manifestaron ayer ante la Delegación del Gobierno en A Coruña para reclamar la aprobación por la vía de urgencia de un estatuto electrointensivo que garantice una regulación energética "adecuada" para la gran industria y la continuidad de los puestos de trabajo en factorías como Alcoa, Alu Ibérica o Ferroatlántica.

Con la participación de trabajadores de las distintas industrias electrointensivas de Galicia „se desplazaron cuatro autobuses de trabajadores de Alcoa desde San Cibrao„ la manifestación partió de la Delegación del Gobierno hasta la Subdelegación para volver a realizar, ya de regreso, el mismo recorrido hasta la plaza de Ourense, donde procedieron a la quema de neumáticos y a la lectura de un manifiesto.

Durante la protesta, los trabajadores corearon lemas como "si no hay solución, Maroto dimisión", en alusión a la ministra de Industria; "el estatuto dónde está" o "queremos trabajar y no emigrar". También portaron una pancarta en la que se podía leer "Por la defensa del empleo y la industria electrointensiva", en el marco de una movilización convocada por CCOO, CIG y UGT.

Y es que, para sus dirigentes sindicales, aún aprobando el estatuto cuyo borrador presentó el Gobierno, sería "insuficiente". "Habría que tomar medidas complementarias para que las empresas de la energía pudieran seguir con un precio justo y competitivo", expuso el secretario xeral de la Federación de Industria de la CIG, Xoán Xosé Bouzas.

Por otra parte, Bouzas recriminó al Gobierno y la Xunta no estar haciendo "nada" por el sector. "Nos tememos lo peor", afirmó, al no descartar cierre de empresas y pérdida de empleo "y que muchas comarcas de nuestro país se queden sin sector industrial". Por ello, advirtió de movilizaciones "más contundentes" después de la convocada ayer si no se mejora el estatuto y se atienden sus alegaciones. En la misma línea, instó al Ejecutivo central a "tomar medidas". "Este no es el estatuto que necesitamos, no cumple para que la energía sea más barata", apostilló, alertando de que Galicia se convertiría "en un desierto industrial que no se puede permitir".

A su vez, Javier Carreiro, secretario general de UGT-FICA Galicia, confió que el Gobierno acepte las alegaciones presentadas por lo sindicatos. "No es el momento de colores políticos, si no de unificar criterios y se ponga por delante un estatuto que nos valga", dijo antes de una movilización en la que participaron representantes políticos de Anova, Marea Atlántica o el BNG.

Por su parte, el secretario general de Industria de CCOO en Galicia, Víctor Ledo, recordó que el pasado día 3 terminó el estudio de las alegaciones. "El Gobierno carece de hoja de ruta", afirmó tras criticar que no se pusiese en contacto con las organizaciones sindicales. Ledo hizo un llamamiento a todos los grupos políticos "a que no apoyen un estatuto que no garantice los empleos del sector electrointensivo". Según precisó, entre directos e indirectos, son unos 10.000 los empleos afectados en Galicia.

Entre los participantes en la protesta, estuvo el presidente del comité de empresa de Alu Ibérica LC (antigua Alcoa A Coruña), Juan Carlos López Corbacho, quien manifestó que el Gobierno "tiene que poner las condiciones óptimas" para garantizar la actividad industrial de este sector. "Es insuficiente", insistió sobre el actual estatuto. Además, alertó de que el Ejecutivo central "va a cerrar la industria elecrointensiva si esto no se arregla". "Tienen que atender las alegaciones", añadió Corbacho, quien incidió en que el colectivo pide tener "las mismas herramientas que trabajadores de Alemania y Francia".

Junto a empleados de Alu Ibérica, también participaron en la movilización miembros de Alcoa San Cibrao, Ferroatlántica, Celsa Atlantic o Megasa, entre otras factorías intensivas en consumo eléctrico.

Por otra parte, sindicalistas de CCOO y trabajadores de la Alu Ibérica A Coruña protestaron ayer ante los juzgados de A Coruña contra la imputación a la que se enfrenta su compañero Diego, por una protesta ante el Congreso de los Diputados que defienden que fue "totalmente pacífica".

El trabajador, investigado judicialmente por supuesto "atentado contra la autoridad" a raíz de la movilización de los empleados de Alcoa ante el Congresos de los Diputados el pasado 28 de marzo, declaró ayer en A Coruña, una hora y media antes de la concentración unitaria de la industria electrointensiva.