La compañía automovilística Nissan cerrará su fábrica de Barcelona y trasladará su producción a diferentes plantas de Renault, según recoge el diario japonés Nikkei. Este movimiento, recogido hace una semana por Reuters, se enmarcaría en un plan de reorganización de la multinacional debido a la pandemia del coronavirus, que podría incluir la reducción de un 20% de su capacidad productiva en Europa hasta el año 2023.

La firma nipona ha señalado en un comunicado que la empresa no hará comentarios sobre los "rumores" que se han publicado en el diario nipón, por lo que no ha confirmado ni desmentido esta información. Esta situación podría poner en riesgo a unos 3.000 puestos de trabajo directos en las instalaciones de la compañía en Barcelona y a cerca de 20.000 empleos indirectos en la provincia catalana. Se trataría, además, del primer cierre de una fábrica de automóviles en España tras la de Santana Motor en 2011.

Justo esta misma semana el secretario general de CCOO, Unai Sordo, pidió al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el marco del pacto para prorrogar los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) hasta el 30 de junio, que buscase la implicación de Renault para evitar el cierre de las plantas catalanas de Nissan.

El sindicato considera que la solución puede venir del fabricante francés, parte de la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi y que a partir de este julio pasará a estar dirigido por el expresidente de Seat, Luca de Meo, que esperan que se pronuncie y traiga "buenas noticias". Nissan en el año fiscal 2019 produjo alrededor de 55.000 vehículos en España, lo que representa aproximadamente el 10% de su producción europea.

Ayer, los comités de empresa de Nissan en Cataluña exigieron a la compañía que desmienta de forma inmediata la noticia y advierten de que si no lo hace, demostraría "una vez más" que se está riendo no solo de sus trabajadores sino de las administraciones, tanto catalanas como del Estado.