Ante el inicio del período de consultas por parte de Alcoa -una especie de trámite informal previo a la ejecución del despido colectivo de 534 personas de su factoría de aluminio de San Cibrao (Lugo)-la ministra de Industria, Reyes Maroto, reiteró ayer a la dirección de la multinacional que "recapacite"; no sin recordarle que lleva años "tutelada" por las administraciones públicas. Según el criterio de esta representante del Gobierno, Alcoa no es solamente víctima del "precio de la electricidad" por lo que insta a la Xunta a implicarse y a no mirar "para otro lado". Mientras, los trabajadores de San Cibrao piden ahora la intervención total "o parcial" de la planta para salvar el empleo y la viabilidad productiva.

La ministra de Industria recordó en una entrevista televisada que "Alcoa es una empresa que siempre ha estado tutelada por las administraciones públicas", con "muchos recursos", como lo demuestra el hecho de que haya recibido en los dos últimos años "más de 37 millones de euros" del Estado. Esa aportación de dinero público -afirmó- ha sido fruto "del esfuerzo colectivo de los españoles". Ante el inicio del período de consultas para el despido colectivo los trabajadores de San Cibrao, la ministra volvió a pedirle a la dirección de Alcoa que "recapacite". Y se dirigió al presidente de la Xunta para que trabaje de "manera leal" con el Gobierno para buscar una solución. Recordó que la actual situación de Alcoa San Cibrao no se debe "solo al problema de la luz, y lo sabe bien el presidente de la Xunta, con el que llevamos dos años trabajando". Por ello, le pidió que "no se ponga de perfil" y que sume para "dar seguridad a los trabajadores" y poner en marcha un "proyecto de futuro", porque la industria es para el Ejecutivo "una prioridad" y la producción de "aluminio primario" es "muy importante".

Desde la Xunta, el conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, se quejó de la callada por respuesta obtenida de los ministerios de Industria y Transición Ecológica tras haber solicitado un encuentro para abordar la situación de la plantilla.

El comité de empresa de San Cibrao reiteró ayer de nuevo su petición al Gobierno para que "haga su trabajo", e intervenga de manera "total o parcial" la fábrica. "Si toda Europa está interviniendo empresas", para evitar que esta crisis se las lleve por delante, "será por algo", dijo el presidente de los trabajadores, José Antonio Zan. Zan recordó que a finales de marzo "Alcoa fue la primera empresa" considerada "esencial" por parte del Gobierno, porque como productora de aluminio primario también abastece a los "sectores farmacéutico y de la alimentación". "Somos indispensables" porque la producción de aluminio primario para abastecer a otros sectores clave en la economía española "no puede depender de otros países", aseveró.

En Marea, por su parte, remitió una carta en las últimas horas a la ministra gallega de Trabajo, Yolanda Díaz, para que haga "valer su posición" y solicite la misma intervención de la empresa que ella defendió tiempo atrás. "Instamos a que mantenga su posición, que la defienda en el Consejo de Ministros de la forma más urgente posible", manifestó Francisco Casal, portavoz de la formación, que instó la "intervención temporal" y la aprobación del estatuto de los consumidores electrointensivos para garantizar el futuro de la planta.