La última fábrica de aluminio de España tiene los días contados. Alcoa marcó ayer para el próximo jueves, 25 de junio, el inicio formal del periodo de consultas del ERE (expediente de regulación de empleo) con el que piensa despedir a 534 empleados y paralizar la producción de aluminio primario en San Cibrao. Los despidos suponen un duro golpe para los concellos de Cervo y Xove, en los que se ubica la instalación, y toda la comarca de A Mariña, que ha vivido en gran medida de esta industria los últimos 40 años. La multinacional estadounidense, que el año pasado se deshizo de sus fábricas de A Coruña y Avilés, considera inviable seguir fabricando aluminio en España, si bien mantendrá en San Cibrao la planta de alúmina con la que surte de materia prima al resto de sus fábricas europeas. Esto permitirá mantener medio millar de puestos de trabajo directos.

Alcoa se ha mantenido inflexible en las últimas tres semanas, en las que los sindicatos han intentado parar los despidos en un proceso de negociaciones informal que ayer se dio por fracasado. Directiva y comité de empresa volvieron a verse las caras ayer en Lugo. La compañía comunicó a los representantes de los trabajadores que la cuenta atrás está en marcha: tienen siete días para designar a los miembros de la comisión representativa que participarán en las negociaciones del período de consulta formal, que durará 30 días. El grupo añadió que hasta el próximo día 25 continuará en contacto con el comité una semana más, la cuarta, para dar cuenta de "las graves circunstancias y de la situación insostenible por la que atraviesa la planta de aluminio".

El presidente del comité de empresa de la planta de aluminio de San Cibrao, José Antonio Zan, calificó ayer de "insulto" la reunión de con directivos de la Aluminum Company of America y anunció "medidas más contundentes" contra el ERE de despido laboral presentado en condiciones que cuestiona.

Zan reprochó a los directivos que aprovecharan un receso de la reunión para enviar una comunicación del inicio del ERE para prescindir de más de medio millar de empleados en lugar de "negociar" el plan de la empresa para evitar los despidos. A su juicio, el anuncio firmado por el presidente de Alcoa en España, Álvaro Dorado, llegó a los empleados de la fábrica "antes de que los representantes del comité de empresa firmasen el recibí" del ERE y, por lo tanto, antes de concluir la supuesta "negociación" planteada por el grupo industrial. El comité no tira la toalla y avanza que "intensificará" las protestas.

"Creemos que esto tiene solución, y muy sencilla. Pero necesitamos un marco energético que llevan dieciocho meses prometiendo", reivindicó Zan en referencia al estatuto electrointensivo que tramita el Gobierno. "Que se dejen de marear la perdiz y se pongan a trabajar", concluyó el representante de la plantilla.

Ante esta situación, el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, informó ayer sobre una misiva "muy seria" al Ejecutivo central en la que llama a convocar "de forma inmediata" la subasta de interrumpibilidad del segundo semestre, para repartir los bonus eléctricos con los que la gran industria aligera su factura de la luz. La carta será remitida a la ministra de la Transición Ecológica, Teresa Ribera, y a la titular de Industria, Reyes Maroto, con "copia" al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. "Si el Gobierno sigue sin sacar el paquete de interrumpibilidad, es evidente que sentencia definitivamente a Alcoa", reprochó Feijóo.

El martes, la ministra Maroto descartó que el problema de Alcoa sea el precio de la energía y aseguró que responde más bien a la falta de inversiones en el pasado. "No ha invertido dinero en la planta", sentenció la responsable de Industria a la vez que recordó que la multinacional sí ha sido perceptora de ayudas públicas, unos mil millones en la última década.

La de San Cibrao es la última instalación que Alcoa mantiene en el país, después de vender las fábricas de A Coruña y Avilés. En 1998 la multinacional se hizo con el negocio del aluminio español en la privatización de Inespal --9 plantas-. La de San Cibrao produce desde 1980.