El último informe sobre la Situación do Emprego en Galicia, elaborado por CCOO, analiza el impacto de la crisis sanitaria desde que arrancó la pandemia a partir de los datos del mes pasado. Uno de los efectos tiene que ver con el auge de la temporalidad en la industria, "un sector identificado con la estabilidad laboral", y que en mayo superó porcentualmente en este ámbito a los servicios, abanderado "de la precariedad". Entonces se registraron en Galicia 30.882 contratos, un 89% de ellos temporales (27.550). Por sectores de actividad, los servicios concentraron el mayor volumen de contratación tanto indefinida como temporal. Pero si atendemos al porcentaje que representa la contratación temporal sobre el conjunto de contratos, el informe refleja que "el porcentaje más alto se corresponde con la industria, donde un 93% de los contratos registrados son temporales seguido de los servicios, con un 90%". "El tamaño de las empresas industriales y su grado de sindicalización hace que cuenten con mejores condiciones laborales que las de servicios, por eso llama la atención el dato", precisa Bouza.

La sindicalista advierte de que "sería nefasto que la industria copiase el modelo de precarización de otros sectores con la excusa del la pandemia". No obstante, reconoce que "el modelo industrial" en la comunidad gallega "ya derivaba antes de la pandemia hacia plantillas con pocos trabajadores en favor de subcontratas o auxiliares". En total, la industria gallega formalizó 426 contratos indefinidos y 5.733 temporales mientras que el comercio firmó 2.036 indefinidos y 18.017 temporales el mes pasado.

El estudio, que también establece una comparativa con la situación laboral en el último año, advierte de "la intensificación de la precariedad como fórmula de contratación ya casi estructural" en el conjunto de la economía gallega.

En el último día del mes de mayo había en Galicia 979.472 personas afiliadas a la Seguridad Social que suponen un incremento del 1% respeto el mes de abril, pero son 34.409 empleos menos que en 2019 y 32.950 menos que antes de la crisis sanitaria. Las ramas de actividad que más sufrieron el impacto de la crisis son la restauración, que pierde 8.015 empleos (-11,5%) en el último año y 5.368 desde el comienzo de la crisis (-8%); las actividades relacionadas con el empleo (ETT y agencias de colocación), que registran 4.310 empleos menos que en 2019 (-37,0%) y 3.741 (-33,7%) menos desde febrero; las actividades de construcción, con 3.018 empleos menos (-6,1%) en los últimos doce meses y 2.275 perdidos desde el comienzo de la pandemia (-4,7%); los servicios de alojamiento, que pierden 2.955 empleos (-27,7%) en el último año y 682 desde el arranque de la crisis sanitaria (-8,1%) y el pequeño comercio, cuya afiliación cae en 2.480 personas en el último año (-2,4%) y en 1.959 desde el Covid (-1,9%). Otras actividades que acusan un fuerte impacto son el empleo en el hogar y la educación.

El informe refleja "una ligera recuperación" del empleo respecto a abril en los sectores de la construcción (fundamentalmente en las actividades de construcción especializada con 1.039 nuevos empleos) y de los servicios, donde recuperan empleo las ETT (+2.125), la Administración Pública (+1.176) y los servicios de restauración (+1.160). Siguen en negativo la educación, que pierde 367 empleos; la sanidad (-141) y las actividades deportivas y recreativas (-134).

Así, en el mes de mayo se produjo una leve disminución del desempleo de 547 personas en relación con el mes anterior. Se redujo el paro en el sector primario (-93 personas), en la industria (-106) y en la construcción (-760), mientras que creció en los servicios (+198).

El desempleo cae, aparte de la construcción y el sector primario, en las actividades administrativas (-353 desempleados), en la hostelería (-227) y en la industria manufacturera (-92). Las actividades en las que más crece el paro coinciden con el comercio (279 desempleados más), la educación (+196) y el empleo en el hogar (+99).

"La ligera reducción del desempleo en mayo no puede ocultar la dramática evolución del paro en Galicia tanto si efectuamos el análisis desde febrero como si nos remontamos un año atrás", asegura el documento de CCOO. Desde febrero, Galicia registra 24.853 parados más y el desempleo aumenta en todos los ámbitos. Por sectores, los servicios registran 19.242 desempleados más en los últimos meses, la industria 2.818, la construcción 1.985 y el sector primario 263.

En los últimos doce meses el desempleo crece en 30.227 personas en Galicia, un 18,8%. "Pasamos de 160.805 personas paradas en mayo de 2019 a tener 191.082 en mayo de este año", constata el informe.

El incremento del desempleo en algunas de las actividades del sector servicios es del 30%, caso de las actividades administrativas (+38%), el transporte y almacenamiento (+36%), el empleo en el hogar (+35%), las actividades financieras y de seguros (+32%), la educación (+31%) o la hostelería (+29%). En la industria y en la construcción los aumentos están por debajo del 20% y en el sector primario del 10%.

El informe revela que en abril había 188.374 gallegos percibiendo una prestación por desempleo, que incluye los ERTE. De estos, 117.616 están afectados por expedientes de suspensión y 10.024 de reducción de jornada. También refleja que la finalización de contratos afectó a 35.824 gallegos, a los que Bouza aventura "dificultades" para retornar al mercado laboral. "La recuperación de la actividad no va a ser intensiva a corto plazo", afirma.

El estudio constata la afiliación por ramas de actividad, la contratación por sectores, el paro registrado por grandes grupos ocupacionales o los beneficiarios de prestaciones por desempleo. "Resulta difícil hacer una fotografía fija en este momento de incertidumbre, marcado aún por la desescalada, de ahí la necesidad de hacer un seguimiento muy estrecho del comportamiento de la economía y sus consecuencias", concluye Bouza.