Los trabajadores de Alcoa San Cibrao representaron ayer su "calvario" con una procesión que terminó con la crucifixión de un muñeco con una careta del presidente de la empresa en España, Álvaro Dorado. En declaraciones a Europa Press, el presidente del comité de Alcoa, José Antonio Zan, explicó han pedido a la empresa que se amplíe el plazo de consulta formal del ERE -que amenaza un millar de puestos de trabajo, 534 directos-, pero por el momento la dirección de Alcoa les ha respondido que "no está por la labor".

Alcoa trasladó hace unos días su intención de abrirse a una extensión de las negociaciones, pero siempre y cuando aprecie "avances" en lo tratado con los trabajadores. Los 30 días naturales de las consultas terminan el próximo 24 de julio, mientras los trabajadores insisten en demandar a las administraciones una intervención. En la protesta, los trabajadores realizaron cánticos como "Álvaro Dorado, primero tú al paro", " A solución, unha intervención" y " Enerxía, solución".

Precisamente, este martes estaba prevista otra reunión entre comité y empresa, pero los trabajadores han declinado ir a una reunión a casi 100 kilómetros en la ciudad de Lugo, mientras permanece cerrada buena parte de la comarca de A Mariña por el rebrote de coronavirus.