El conselleiro de Economía, Emprego e Industria en funciones, Francisco Conde, indicó ayer que la caída del Producto Interior Bruto (PIB) gallego estará este año en torno al 10%, pero considera que Galicia está en "mejores condiciones" que otros territorios del entorno para afrontar la recesión económica generada por la crisis sanitaria del Covid-19.

El conselleiro identificó tres aspectos para la reactivación económica: el apoyo a los sectores más perjudicados, como el comercio, el turismo o la automoción; la apuesta por la competitividad y una transformación digital y energética.

El plan de reactivación elaborado por la Xunta, defendió, es "la base" para la recuperación económica y "lo primero que tendrá que hacer el nuevo Gobierno" será trasladárselo a los grupos políticos de la oposición y presentarlo en el diálogo social, señaló en una entrevista en la Cadena SER.

Pese a considerar que la comunidad cuenta con "bases sólidas" en el tejido productivo y con la "estabilidad" del Gobierno y que Galicia estaba antes de la crisis del coronavirus "mejor que la media de España en todas las variables macroeconómicas", Conde cree que en la actualidad hay "una situación de mayor dificultad derivada de la política energética" del Ejecutivo estatal, que está "poniendo en apuros a las empresas electrointensivas".

A estas dificultades contribuyen también la "incertidumbre por el futuro de Ence", que afecta al sector forestal, y los efectos que pueda tener sobre las actividades en dominio público marítimo-terrestre una posible modificación de la Ley de Costas, algo que la Xunta teme tras ver el proyecto de ley contra el cambio climático.

Sobre Alcoa, recordó que el plazo de negociación del ERE presentado para la planta de San Cibrao (Lugo) para 534 trabajadores termina el próximo viernes. El conselleiro admitió que el Gobierno "acierta" cuando asegura que las competencias en materia de industria son de la Xunta, pero recalcó la necesidad de establecer un precio de la energía "competitivo" o realizar una "intervención" de la planta de San Cibrao.