El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró ayer que el Ejecutivo "en absoluto" se desentiende de la planta de Alcoa en San Cibrao, en Lugo, sino que está negociando con la compañía, y solicitó la colaboración de la Xunta de Galicia en este sentido.

Sánchez, durante su comparecencia en el Congreso para explicar los últimos consejos europeos, se pronunció así en respuesta a la intervención del diputado del BNG, Néstor Rego.