La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) ha anunciado una serie de cambios en el marco de actuación de sus políticas para adaptarse a los cambios de la realidad económica, incluyendo una definición más flexible del objetivo de inflación del 2% de la entidad, que pasará a ser una media a largo plazo, lo que permitirá un mayor margen de actuación para la política monetaria del banco central estadounidense, según ha anunciado el presidente de la entidad, Jerome Powel.. Este movimiento prolonga la era de bajos tipos de interés.

Los cambios introducidos, que en su discurso inaugural del simposio de Jackson Hole el presidente de la Fed ha definido como "una robusta actualización del marco de política monetaria", contemplan que la meta de inflación a largo plazo de la entidad del 2% pasará a ser "un promedio a lo largo del tiempo", por lo que, después de períodos en los que la inflación haya estado persistentemente por debajo del 2%, la política monetaria podrá permitir durante algún tiempo una inflación "moderadamente superior al 2%".

El Comité de Mercado Abierto de la Fed ha aprobado también modificar la definición relativa al mandato del banco central respecto del máximo empleo al considerarlo un objetivo amplio e inclusivo y señalar que sus decisiones en ese aspecto tendrán en cuenta "evaluaciones de las deficiencias de empleo desde su nivel máximo" cuando anteriormente se refería a "desviaciones de su nivel máximo".

Asimismo, el banco central estadounidense ha subrayado que la actualización de la estrategia de su marco de actuación reconocen de manera explícita los desafíos que plantea para la política monetaria un entorno de tipos de interés persistentemente bajos tanto en los Estados Unidos como en todo el mundo, y ha advertido de que es más probable que los tipos de interés de la política monetaria se vean más limitados por su límite inferior efectivo que en el pasado.