La asociación de autónomos ATA publicó esta semana su sexto Barómetro, marcado por "los últimos acontecimientos, en plena segunda ola de contagios de la Covid-19, con nuevos confinamientos y aumento de las restricciones en prácticamente toda España". ATA señala que "el pesimismo y la incertidumbre se reflejan en las respuestas". Así, uno de cada dos autónomos, unos 1,6 millones en términos absolutos, afirma que han visto disminuir su facturación por encima del 60%. Además, uno de cada tres autónomos, en torno a 500.000, prevén disminuir la plantilla durante este año. El sondeo es el resultado de 2.103 respuestas -dándose por válidas 2.035-para una población total de 3.258.758 (número de afiliados al RETA en agosto de 2020, datos medios). "Estamos en una situación de emergencia. Y vamos tarde. Es necesario implementar medidas ya que salven actividades de autónomos, sus empresas y los empleos que generan", aseguró el presidente de ATA, Lorenzo Amor. "Volvemos a estar en una situación extraordinaria que necesita de medidas extraordinarias", remarcó Amor.

Un 12,5% de los encuestados, lo que extrapolado al total del colectivo rondaría los 370.000 autónomos, tienen sus negocios cerrados en estos momentos, de los que el 7,7% aún no ha abierto desde el pasado mes de marzo en que se declaró el estado de alarma. Además, un 57,6% afirma que aunque ha abierto, funciona al 50%. Solo el 15,6% de los encuestados opera con total normalidad.

Morosidad

Los resultados muestran cómo 8 de cada 10 autónomos (el 80,8%) aseguran que la facturación de su negocio se ha visto reducida respecto a la del año anterior. El 13,5% sostiene que se ha mantenido y hay un 3,1% que considera que incluso ha aumentado.

De ese gran porcentaje de autoempleados con menos caja que el año pasado, el 8,3% confiesa que no está ingresando nada. Un 51,1% han visto reducida su facturación en un 60% o más, lo que en términos absolutos afecta a1.600.000 autónomos españoles.

La morosidad es otro problema destacado. En este barómetro uno de cada tres autónomos asegura que la sufren (el 33,2%), de los que el 16,9% se refieren a morosidad por parte de empresas privadas exclusivamente.