El Gobierno de Malvinas lleva cuatro años poniendo encima de la mesa la importancia de mantener un arancel cero para sus exportaciones una vez superado el Brexit, haciendo saber a Londres de la debacle para sus cuentas y sus pesqueras —socias de la flota gallega— si se aplican las tarifas de la Organización Mundial del Comercio (OMC) en caso de un acuerdo. Ahora, a tan solo unos días de que se consume, desde el archipiélago entienden que es ahora o nunca. La Administración isleña ha lanzado un escrito urgente en el que se alinea con la flota gallega y pide la “intervención” directa del premier británico Boris Johnson para evitar in extremis un duro golpe económico para su PIB y las cuentas de las pesqueras. Para ello, plantean cinco opciones.