El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, instó ayer a los bancos a volver a elevar las provisiones para afrontar el futuro aumento de los impagos que provocará la pandemia, tras la reducción de las mismas que realizó el sector en el tercer trimestre. No es un mensaje nuevo, pero cobra particular relevancia porque las entidades están cerrando estos días los resultados de 2020 que presentarán en las próximas semanas.

Según estimó ayer Standard & Poor’s, la morosidad se va a más que duplicar en los próximos trimestres, desde el 4,57% del pasado octubre hasta alcanzar el 9,5%-10% a finales de este año o la primera mitad del próximo.

Aumento “significativo”

Durante su participación en el Spain Investors Day, Hernández de Cos pronosticó un “aumento significativo de la tasa de dudosos en los próximos trimestres, incluso en el escenario más benigno”. El alto funcionario no ha presentado un cálculo, pero de confirmarse el de la agencia de calificación, el peso de dichos activos de dudoso cobro sobre los créditos totales se elevaría hasta niveles de 2016, aunque quedaría por debajo del máximo del 13,62% que se alcanzó en diciembre de 2013.

El gobernador destacó que los bancos aumentaron un 75% sus provisiones entre enero y septiembre de 2020 para anticiparse al futuro incremento de los impagos. Aunque no lo dijo, con todo, ese esfuerzo se concentró en el primer y, sobre todo, segundo trimestre, mientras que en el tercero las entidades optaron por relajarlo para mejorar sus resultados.