El déficit del conjunto de las administraciones públicas -salvo las corporaciones locales, cuyos datos aún no se conocen- cerró noviembre de 2020 en 87.603 millones de euros, equivalentes al 7,82% del PIB, con lo que quintuplica el ratio del mismo periodo de 2019 (1,58% del PIB).

La información sobre ejecución presupuestaria publicada este viernes por el Ministerio de Hacienda sitúa el déficit público todavía lejos de la estimación del Gobierno para el conjunto del ejercicio, el 11,3% del PIB, cuando solo falta un mes por incorporar, unos datos que se conocerán el próximo 31 de marzo.

El incremento del déficit se produce en un contexto marcado por la pandemia de coronavirus, que ha disparado los gastos, que crecieron un 10,7%, al tiempo que mermado los ingresos, que en esos once meses bajaron un 5,4%.

En términos primarios -es decir, sin tener en cuenta el coste de los intereses de la deuda- el déficit fue de 65.085 millones, un 5,81% del PIB, cuando un año antes se registraba un superávit de 5.922 millones, un 0,48% del PIB.

Entre enero y noviembre, los gastos públicos ascendieron a 473.552 millones de euros, un 10,7% más, un dato que incluye un gasto asociado a la pandemia de 35.250 millones, así como un importante repunte de los recursos dedicados a subvenciones (del 85,8%) y prestaciones (del 17,1%).

Por lo que respecta a los ingresos, alcanzaron los 385.949 millones, un 5,4% menos, ante la menor recaudación tributaria (que cae un 9%) y las menores transferencias entre administraciones públicas (cae un 18,6%).

Por subsectores, la mayor parte del déficit se concentraba en la administración central, cuyo desfase ascendía a 72.401 millones -un 6,46% del PIB, un ratio que multiplica por siete el de 2019-, ante el desplome de la recaudación tributaria estatal (cae un 14,2%).

Junto a ello, el Estado ha incrementado sus gastos en 37.745 millones, principalmente por transferencias para paliar los efectos de la pandemia: 18.003 millones a la Seguridad Social, 2.300 millones al Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) y 11.000 millones a otras administraciones territoriales por el Fondo Covid-19.